SANTIAGO, 28 mar (Xinhua) -- El ministro chileno de Hacienda, Alberto Arenas, dijo hoy que la proyectada reforma tributaria que impulsa la administración de Michelle Bachelet busca enfrentar la desigualdad por la necesidad de un desarrollo económico sustentable socialmente.
"La mayor desigualdad es un freno para el crecimiento. Enfrentar decididamente la desigualdad en todas sus dimensiones es generar también condiciones para un crecimiento sustentable", dijo Arenas en el marco de un seminario empresarial en Santiago.
Para el titular de Hacienda "la reforma tributaria, a nuestro juicio, es una herramienta fundamental para darle gobernabilidad al crecimiento".
Bachelet, quien asumió el 11 de marzo, anunció el próximo envío al parlamento de un proyecto de ley que alzará los tributos a las utilidades de las empresas desde el 20 al 25 por ciento y eliminará una exención tributaria a las utilidades reinvertidas.
Las medidas esperan recaudar 8.200 millones de dólares adicionales para el fisco para acometer la reforma más ambiciosa de la administración de centroizquierda, la reforma a la educación.
Surgido como un eco de las masivas manifestaciones estudiantiles de 2011, la propuesta supone un fortalecimiento de la educación pública y el término de los subsidios estatales a la educación privada con fines de lucro.
La reforma persigue como objetivo de largo alcance disminuir fuertes las brechas sociales en el país.
En ese sentido el jefe del equipo económico de Bachelet dijo no tener dudas que el ingreso per cápita de Chile superará en el año 2020 lo que hoy se define como los umbrales del desarrollo, es decir, los 22.000 dólares.
Sin embargo, aclaró que si bien para algunos, "alcanzar en unos años más ese nivel de ingreso per cápita es el desarrollo, para nosotros es alcanzar un desarrollo estadístico".
"Para que Chile entre al umbral del desarrollo, no solamente tiene que alcanzar ingresos per cápita de 22.000 dólares o más. Lo que tiene que hacer es enfrentar las desigualdades", añadió.
La propuesta de alza de tributos enfrenta reticencias del empresariado y la oposición de derecha, aunque el oficialismo tiene una ajustada mayoría en el parlamento.
Un informe dado a conocer la semana pasada por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) ubicó a Chile como el país con la peor distribución del ingreso de la organización.