Los presidentes participantes en la Cumbre de la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (Celac) acordaron un plan de cooperación y apoyo para Haití, dentro de los convenios suscritos por los representantes de los gobiernos de la región en la Declaración de Santiago.
La cumbre Celac se realizó entre el 27 y 28 de este mes en Chile, a la que asistieron los mandatarios de 33 naciones que la componen y en la que se emitieron una serie de acuerdos que se resumen en la Declaración de Santiago.
Tras finalizar hoy la cumbre de la Celac en la capital chilena, los mandatarios aceptaron un plan de desarrollo y reconstrucción a Haití, que está postrada por las consecuencias de sus crisis políticas y sociales además del terremoto del año 2010 que destruyó gran parte de su infraestructura.
La declaración de la Celac estipula que la organización buscará "seguir contribuyendo efectivamente al esfuerzo de su reconstrucción y desarrollo, de acuerdo con las prioridades y necesidades fundamentales que defina el gobierno de Haití, con pleno respeto a su autoridad y soberanía y al principio de no intervención en los asuntos internos", señala el documento.
La declaración agrega que "teniendo presente el hecho de que la República de Haití ha sido considerada por las Naciones Unidas como un País Menos Adelantado y en este contexto, requiere que sus necesidades específicas sean consideradas en profundidad y de manera permanente".
Para esto, se desarrollará un plan de ayuda que comprenderá temas como energía, empleo, defensa del estado de derecho y fortalecimiento de las instituciones del Estado, educación, medio ambiente, erradicación del hambre y la extrema pobreza y salud.
Asimismo, se destaca el deseo del gobierno haitiano, encabezado por el presidente Michel Martelly, de recibir la "cooperación técnica y financiera internacional, regional y bilateral sea coordinada íntegramente por el conducto del gobierno de Haití y de conformidad con las prioridades que este establezca".
Esta resolución sobre Haití se enmarca dentro de una política de estrechamiento de las relaciones con las naciones caribeñas, como es la incorporación de la Comunidad del Caribe (Caricom) como miembro pleno de la troika ampliada de la Celac.