Ultimos días de Wan Aihua

  2013:09:09.13:59

“No quiero morir, porque soy testigo y tengo que esperar al día en que el gobierno japonés se disculpe.” Es lo que siempre repetía Wang Aihua, de 84 años de edad, cuando estaba viva. Dijo que no temía morir, pero el acoso que sufrió en aquel entonces se ha quedado marcado para el resto de su vida. Desde que tenía 14 años, Wan Aihua había sido capturada tres veces por militares japoneses, donde sufrió muchos maltratos inhumanos y acosos sexuales que le causaron roturas en muchas partes de su cuerpo, esterilidad, y numerosas molestias de las secuelas para el resto de su vida. En 1992, Wang Aihua se convirtió en la primera persona que denunció a los militares japoneses por acoso sexual. A las 0:45 por la madrugada del 4 de septiembre, Wan Aihua, la mujer acosada china y pionera en denunciar contra Japón, falleció aguantando la injusticia y con su deseo insatisfecho. Todos sus sufrimientos y pesadillas se enterraron en la historia junto con su fallecimiento, sin ningún testamento dejado. De junio de 2012 a julio de este año, el reportero visitó a la anciana numerosas veces, y grabó los últimos días de su vida. “Sigo viviendo con el fin de continuar la denuncia contra el gobierno japonés para que se disculpe. Sólo con este acto bien hecho y cumplido, puedo morir libre de preocupación.” Es el deseo más anhelado de la anciana, sin embargo, hasta en momento de su muerte, Wang Aihua no recibió ningún “perdón” del gobierno japonés y tuvo que abandonar el mundo con pena.