A las 6 por la mañana del 4 de junio, el Sr. Chen, que estaba paseando a su perro, se encontró en el suelo junto a una pared en la ciudad Nanjing a un bebé abandonado cubierto por con una manta roja y sin signos de vida. Al recibir la llamada, el personal del 110 y 112 (línea telefónica de denuncias de asuntos delictivos y rescates de emergencia) se apresuró al lugar. Tras examirarlo, dieron al niño de cuatro meses por muerto. En este momento, la policía local está investigando este asunto a través de cámaras de vigilancia, etc.