La tensión en Jerusalén se produce en un momento en el que Estados Unidos se ha esforzado por reanudar las conversaciones de paz entre Israel y los palestinos, las cuales suspendieron en 2010 debido a una disputa sobre las actividades relacionadas con asentamientos judíos en Cisjordania y Jerusalén Este.
El enviado especial del llamado Cuarteto internacional para Medio Oriente, Tony Blair, exhortó a Israel a respetar el derecho de los devotos a practicar su religión, así como su acceso libre a los lugares de culto.
"Me preocupan la creciente tensión en los sitios sagrados de Jerusalén y las escenas de violencia que hemos observado durante la Pascua de este año", indicó el ex primer ministro británico mediante un comunicado.