Niña traficada de 7 años recibe tratamientos en Pekín |
Pekín, 06/01/2012 (El Pueblo en Línea)--Una niña de siete años que fue vendida cuando era un bebé y posteriormente fue abandonada, arribó el viernes a Beijing para recibir tratamiento médico después de que activistas antisecuestros reportaran su caso a la policía, poniendo de manifiesto los continuos problemas que enfrenta China para hacer frente al tráfico de niños.
Zhong Tingting, cuya ciudad natal se desconoce, fue supuestamente vendida a Xie Suitian y su esposa Chen Ailing, en Ruian, provincia de Zhejiang, siete días después de su nacimiento. Alrededor de dos meses más tarde, la pareja llevó a la niña con un matrimonio en la provincia de Pingyang.
El campesino Zhong Zhengchi, de 55 años, quien desde entonces crió a Tingting con su esposa, viajó a Beijing con su hija mayor y la propia Tingting. La familia está alojada en un hotel próximo al Beijing Children’s Hospital, en el distrito de Xicheng, mientras esperan a que la pequeña sea evaluada por los doctores en los próximos días por una enfermedad aún no diagnosticada de su sistema nervioso. Los gastos han sido pagados por iKang Goubin Health Management Company, con sede en la capital china.
En conversación con Global Times, Zhong recordó cómo fue que acogieron a Tingting. “Fue una noche de finales de abril de 2006. La familia que la compró nos despertó tocando insistentemente a la puerta. Mi esposa había criado a uno de sus familiares, por lo que ellos pensaban que nosotros sabíamos cómo criar bien a los niños”, comentó y agregó que no dijeron por qué no querían quedarse con la niña.
Al principio la pareja pagó a Zhong 10.000 yuanes (1.605 dólares), pero cuando descubrió que Tingting padecía una enfermedad del sistema nervioso y malnutrición, le dijo al matrimonio de campesinos que la abandonara.
“Ellos me dijeron que tirara a la pequeña donde yo quisiera, en una pila de basura, en el cruce de una carretera, pues a ellos no les preocupaba. Pero no pudimos hacerlo”, recordó Zhong.
Xie le entregó a él un “contrato de adopción”, pero como él no sabía leer, no pudo darse cuenta de que Xie había escrito que ellos no se responsabilizaban más por la chica ni pagarían más dinero.
Como Tingting no había nacido allí, no tenía hukou (registro de residencia) y, por tanto, no tenía tampoco acceso a la educación o los servicios de salud y su condición médica seguía siendo una preocupación para Zhong y su esposa.
Las escuelas locales no la aceptaban y ella era objeto de las estupideces de otros niños por ser huérfana, por lo que le daba miedo asistir a la escuela.
La ansiedad de Zhong y su esposa también aumentaba, porque ellos estaban viejos y su hijo y su hija rechazaban que criasen a Tingting.
“Nosotros somos pobres y nos estamos poniendo viejos, por lo tanto, pensábamos en cómo viviría la niña cuando ambos no estuviéramos”, señaló.
Vecinos que se habían identificado con la historia de Tingting contactaron con la Fundación Antisecuestros Weibo, una organización no gubernamental de la página de microblog Sina. Un voluntario de la ONG que pidió ser llamado Zaizai, dijo posteriormente que él investigó la situación de la pequeña y reportó su caso a la policía.
“La policía local prometió que tomaría una muestra de sangre de Tingting y la registraría su ADN en su base de datos nacional de antisecuestros para saber dónde ella había nacido, y aseguró que solucionaría lo referente al registro de residencia y la educación de la niña”, relató Zaizai.
Mientras tanto, las autoridades investigan si la niña fue vendida por sus padres biológicos o fue secuestrada.
Li Qin, de la Fundación Antisecuestro Weibo, señaló que desde que la ONG fue fundada, en abril de 2012, ha cooperado con la policía en el rescate de seis niños y el arresto de 12 criminales, pero la principal dificultad es conseguir que la gente entienda, especialmente en las zonas rurales, que la venta de niños es un crimen tan grave como el secuestro.
“Estas personas no tienen idea de que la compra y venta de niños es también un crimen muy grave”, subrayó Li y pidió mayores esfuerzos para encontrar a los padres después que un niño robado es identificado.
Determinar las cifras exactas del número de niños que son secuestrados es difícil, pero Charles Custer, un realizador de documentales independiente de Estados Unidos, autor de Living With Dead Hearts, un documental dedicado al tema de los niños robados, estima que alrededor de 70.000 pequeños son raptados cada año en China.
Un reporte de people.com.cn, de diciembre de 2012, señala que en el último cuatrimestre de ese año fueron desmanteladas nueve redes de tráfico de niños, 355 sospechosos fueron arrestados y 85 niños fueron rescatados.