La Administración General de Supervisión de Calidad, Inspección y Cuarentena de China urgió hoy jueves a las autoridades pertinentes a reforzar las medidas de cuarentena para evitar la entrada de la fiebre amarilla en el país.
Sudán registró hasta el 11 de noviembre un total de 329 casos sospechosos de contagio, entre ellos 97 muertes, según un comunicado publicado en la página web del organismo chino en el que se cita un informe de la Organización Mundial de la Salud.
La administración pidió a las autoridades locales que intensifiquen la monitorización de la temperatura corporal y la realización de otras inspecciones médicas a los viajeros procedentes de Sudán.
Las personas que lleguen a China desde ese país africano deberán alertar a las autoridades aduaneras de inspección y cuarentena si desarrollan síntomas como fiebre o ictericia y deberán ser aislados inmediatamente.
La administración también urgió a las autoridades locales a intensificar las inspecciones de cuarentena en los vehículos y contenedores procedentes de dicho país africano.
La fiebre amarilla se transmite a través de los mosquitos. Entre tres y seis días después de la picadura, las personas contagiadas empiezan a desarrollar síntomas como fiebre, escalofríos, dolores de cabeza y espalda y dolores musculares.
La administración aconsejó a los ciudadanos chinos que quieran viajar a Sudán que se vacunen antes contra la fiebre amarilla y tomen medidas para evitar las picaduras de mosquitos, según el comunicado.