Convertir la Franja y la Ruta en un camino de apertura

La foto muestra la terminal petrolera de Kipevu del puerto de Mombasa en Kenia construida por China Communications Construction Group. La terminal se completó en julio de 2022 y ha mejorado significativamente la capacidad del puerto de Mombasa para manejar petróleo. (Foto de Yan Yunming/Diario del Pueblo)

Por Ren Ping

La globalización económica hace que la economía mundial sea un todo, donde los países están interconectados y son interdependientes. Ningún país puede lograr la modernización apoyándose únicamente en sí mismo y en un entorno cerrado. Fortalecer la conectividad es esencial para el desarrollo común.

Arraigada en el contexto histórico de la Ruta de la Seda, la Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI) hereda el espíritu de paz y cooperación, apertura e inclusión, aprendizaje mutuo y beneficio mutuo de la Ruta de la Seda. Desde sus inicios, la iniciativa se ha caracterizado por su carácter abierto e inclusivo.

En la península de Indochina, el ferrocarril China-Laos ha convertido a Laos de un país sin salida al mar a un país conectado por tierra, facilitando enormemente los viajes de personas a lo largo de la ruta y estimulando efectivamente la economía local. En Kazajstán, la cooperación entre China y Kazajstán en la reconstrucción de la refinería de petróleo de Shymkent ha dado como resultado una reducción del 90% de las emisiones contaminantes y la capacitación de un gran número de personal técnico. En Kenia, el ferrocarril de vía estándar Mombasa-Nairobi ha contribuido al crecimiento económico local en más de 2 puntos porcentuales.

Durante la última década, la construcción conjunta de la BRI ha promovido efectivamente la conectividad y ha permitido a los países y regiones participantes integrarse mejor en las cadenas globales de suministro, industriales y de valor, abriendo oportunidades de desarrollo más amplias.

La BRI ya ha generado más de 3.000 proyectos cooperativos, atrayendo casi 1 billón de dólares en inversiones y creando numerosos "hitos nacionales", "proyectos de medios de vida" y "monumentos cooperativos".

La BRI ha establecido un nuevo modelo de cooperación beneficiosa para todos. Se ha convertido en un bien público mundial muy popular, una plataforma para la cooperación internacional, así como un "cinturón de desarrollo" en beneficio del mundo y un "camino hacia la felicidad" para los pueblos de todos los países.

La apertura es una fuerza impulsora clave detrás del progreso de las civilizaciones humanas y un camino intrínseco hacia la prosperidad y el desarrollo globales. El mundo actual se enfrenta a cambios acelerados no vistos en un siglo, así como a una lenta recuperación económica. De los problemas a los que se enfrenta la economía mundial, ninguno puede ser resuelto por un solo país.

Las economías progresan a través del intercambio y la interconectividad y se quedan atrás debido al aislamiento y el cierre. La economía mundial sólo podrá superar las dificultades y lograr un crecimiento inclusivo y una prosperidad compartida si se desarrolla firmemente una economía mundial abierta, se comparten oportunidades y beneficios y se trabaja para lograr beneficios mutuos y resultados beneficiosos.

Al construir una plataforma abierta y cooperativa, la BRI promueve el establecimiento de un sistema de reglas justo, equitativo y transparente para la economía, el comercio y la inversión internacionales. Facilita el flujo ordenado de factores de producción, la asignación eficiente de recursos y una profunda integración de los mercados, creando un entorno propicio para el desarrollo abierto. Defiende y promueve una economía mundial abierta, impulsa la globalización económica y logra beneficios mutuos, prosperidad compartida y desarrollo sostenible entre diferentes países.

La apertura es la tarjeta de presentación de la China contemporánea. La modernización china avanza continuamente a través de una mayor apertura y de interacciones positivas con otros países. La BRI se adhiere al principio de consulta amplia, contribución conjunta y beneficios compartidos, y aboga por un verdadero multilateralismo en el que los países aborden cuestiones que importan a todos a través de consultas. Promueve las fortalezas y potenciales de todas las partes involucradas, liberando plenamente sus ventajas.

Los logros de la BRI en la última década son evidentes, lo que demuestra la firme determinación y las acciones prácticas de China para compartir sus oportunidades de mercado con el mundo y promover activamente la construcción de una economía mundial abierta. Los logros también muestran que la BRI es un verdadero “coro” que comprende a todos los países a lo largo de las rutas, y no un “solo” cantado por China. Es una "vía soleada" para que China comparta oportunidades y busque el desarrollo común con el mundo.

Siguiendo el diálogo y la consulta, la construcción y el intercambio conjuntos, la cooperación de beneficio mutuo y los intercambios y el aprendizaje mutuo, al mismo tiempo que se amplían los puntos comunes y la convergencia de intereses, este camino de apertura se hará más amplio y se extenderá a lugares más distantes.

Las diversas decoraciones del templo Kaiyuan en Quanzhou, provincia de Fujian, sureste de China, importante punto de partida de la Ruta Marítima de la Seda, como las estelas de estilo brahmanista, los pilares con motivos hindúes y los pedestales con motivos purushamriga, representan vívidamente la próspera escena de la antigua Ruta Marítima de la Seda.

La prosperidad de la civilización y el progreso de la humanidad no se pueden lograr sin buscar puntos en común, reservando al mismo tiempo las diferencias, la apertura y la inclusión, los intercambios culturales y el aprendizaje mutuo.

En la actualidad, la construcción conjunta de la BRI ha alcanzado un nuevo punto de partida. Al adherirse al principio de consulta amplia, contribución conjunta y beneficios compartidos, y promover la conectividad y la cooperación, China se comprometerá con la apertura para enfrentarse a los desafíos del desarrollo, fomentar la sinergia para la cooperación, generar el impulso de la innovación y generar beneficios para todos.

La construcción de alta calidad de la BRI abrirá nuevos espacios para el crecimiento económico mundial y hará nuevas contribuciones para mejorar el bienestar de las personas en todos los países.