Estudiante de doctorado discapacitado inspira a los internautas chinos

Pueblo en Línea  2021:11:15.14:07

Yuan Xin trabajando en su escritorio. [Foto: Universidad de Ciencia y Tecnología de Wuhan]

Yuan Xin, un estudiante de doctorado de la Universidad de Ciencia y Tecnología de Wuhan, conmovió a muchos internautas con su inspiradora historia de vida y superación.

Yuan, que perdió un brazo durante un accidente en la infancia, ahora tiene 26 años y cursa el tercer año de un doctorado. Durante siete años, con una sola mano ha trabajado codificando, hecho que le permitido ganar 30 premios honoríficos, incluida una patente de invención, una patente de modelo de utilidad y una patente de diseño.

Antes de asistir a la universidad, Yuan pasó de ser un novato que nunca había tocado una computadora a ser un estudiante que en el laboratorio guía a sus compañeros por el camino de la investigación científica.

"Si me quejo del destino, entonces todo lo que puedo hacer es garabatear a través de la vida. Siempre habrá personas que tengan éxito en la vida. ¿Quién dice que no puedo ser yo?", precisó Yuan durante una entrevista con Changjiang Daily.

Cuando se le preguntó sobre sus planes futuros, Yuan declaró que planea continuar la investigación académica, señalando que le interesa la realización de experimentos científicos.

Los logros de Yuan no sorprende a quienes lo conocen. Debido a sus circunstancias, a menudo tenía que trabajar hasta tarde. Yuan era conocido por ser el primero en ingresar al laboratorio, a veces llegaba a las cinco de la mañana. Incluso durante las vacaciones, se le veía trabajando duro.

"Siempre vendrá antes y se irá más tarde que tú", asegura Xu Xin, supervisor doctoral de Yuan.

"Él no es tan diferente por ser incapacitado. Su progreso es más rápido y se preocupa por más cosas en el laboratorio que nosotros. No importa quién le pida ayuda, siempre está dispuesto", asegura Wang Shiqin, estudiante de tercer año que publicó dos artículos de SCI con la ayuda de Yuan.

Además de los logros académicos, Yuan se inscribe en competencias y actividades.

Durante una reunión deportiva, nadie en la universidad se inscribió en la carrera de larga distancia de 10.000 metros. Yuan se ofreció como voluntario y corrió bajo la lluvia. Su participación conmovió a muchos profesores y estudiantes.

"Es difícil tener un nivel tan alto de logro, incluso para estudiantes sin limitaciones físicas", indicó Li Kenuo, consejero de pregrado de Yuan.

"Yuan perdió un brazo. Se necesita 10 o incluso 100 veces más esfuerzo que la gente común para lograr tal resultado. Conozco bien las dificultades que enfrenta", destaca Fang Yuan, madre de Yuan Xin, quien a menudo llora de alegría al verificar los logros de su hijo.

A la edad de 3 años, Yuan fue atropellado por un camión mientras cruzaba la calle con su madre. Después de cinco meses de tratamiento en tres hospitales diferentes, la vida de Yuan se salvó pero perdió su brazo derecho.

Para cuando Yuan llegó a la edad escolar, su madre no se apresuró a enviarlo al jardín de infantes. Fang, quien cree firmemente que "el conocimiento cambia el destino", le enseñó a su hijo en casa, ayudándolo a dominar la escritura con su mano izquierda.

"El oro siempre brillará, ya sea con uno o dos brazos", asegura Fang.

Desde la escuela primaria hasta la secundaria, las calificaciones de Yuan estaban entre las mejores de su clase. Sin embargo, a pesar de sus mejores esfuerzos, no podía escapar del ridículo y la intimidación de sus compañeros que se reían de él y le ponían apodos.

Estas experiencias negativas hicieron que Yuan cuestionara si sus esfuerzos valían la pena. Pero las palabras de su madre reavivaron su determinación.

"Hay cien maneras en que una persona puede vivir, no hay necesidad de preocuparse por los pensamientos de los demás", le aseguraba su madre Fang, quien lo alentó y apoyóen cada paso del camino.

En la escuela secundaria, Yuan experimentó la amabilidad y el apoyo de sus compañeros y maestros. Juntos, se prepararon para el gaokao, el examen nacional de ingreso a la universidad.

Para su especialización, Yuan quería convertirse en médico para salvar a más personas como su abuela política, que falleció el primer día de su examen. La realidad de su condición, sin embargo, significaba que nunca podría estar a cargo de las operaciones médicas.

Después de pensarlo mucho, Yuan eligió la informática y fue admitido en WUST en 2014.

Como nunca había tocado una computadora antes de ingresar a la universidad, Yuan trabajó más duro que la mayoría. Pasó más de tres meses en la biblioteca practicando la mecanografía y alcanzó a sus compañeros rápidamente.

Durante sus últimos semestres, se le otorgó la elegibilidad para el programa académico sucesivo de posgrado y doctorado, lo que le permitió seguir en la universidad después de terminar el plan de estudios de pregrado.

"Soy más lento que los otros, así que siempre hay cosas que necesitan terminarse. Y para ello lo que puedo hacer es trabajar horas extras", concluyó Yuan.