La Franja y la Ruta está conectando a países y pueblos, por lo que China se está convirtiendo en un destino de elección para los jóvenes y para personas con ambiciones.
Desde que se graduó de la Universidad Renmin de China en Beijing, Khisamutdinov Maxim, originario de Rusia, ha estado trabajando para la empresa de entregas SF Express en Shenzhen. Es el encargado de logística para Rusia y Ucrania.
En 2014, cuando era nuevo en la compañía, se enviaban al día alrededor de 10.000 paquetes exprés a Rusia a través de SF, actualmente el número supera los 200.000 paquetes.
Maxim recuerda que antes de que los servicios de mensajería chinos empezaran a hacer envíos a Rusia, podía tardar hasta un mes para que un paquete fuera entregado. Actualmente, los paquetes enviados a través de SF sólo tardan siete días y cuestan una fracción del precio de importantes servicios de mensajería occidentales, indicó.
Pareng Kwan Sim Santi llegó a Beijing en 2004 y obtuvo su título de licenciatura y su grado de doctorado en la Universidad de Negocios Internacionales y Economía. Ahora, ella trabaja para el fabricante chino de teléfonos inteligentes Xiaomi, atiende a usuarios de Indonesia, recibe retroalimentación y ayuda a los ingenieros en Beijing a hacer que sus productos sean más atractivos para el mercado de Indonesia.
La especialista ingresó a Xiaomi en 2014 y colaboró con la compañía para lanzar las versiones indonesias de sus smartphones adaptados a la cultura local. Con ello contribuyó a que Xiaomi se convirtiera en el tercer teléfono inteligente más importante en Indonesia. Xiaomi ahora manufactura auriculares localmente, gracias a lo cual genera empleos y eleva los ingresos por impuestos para el país.
Xiaomi vende teléfonos en más de 30 países de la Franja y la Ruta. Pareng está orgullosa de ser parte de esta expansión.
La Franja y la Ruta no es nada más una vía en un sólo sentido. Los jóvenes empresarios están muy conscientes del colosal mercado que existe en China hambriento de sus marcas locales.
Miras Kilybayev, de 25 años, originario de Kazajistán, es subdirector de Jinsi Oil que opera en la zona de depósito franco en Alataw Pass, fronteriza con Kazajistán en la región autónoma uygur de Xinjiang. Jinsi Oil es una de las mayores compañías agrícolas en Kazajistán y el año pasado llegó a China para expandir el negocio de la compañía.
Kilybayev aprendió chino en la Universidad Tsinghua y estudió ingeniería química en el Instituto de Tecnología de Beijing. Después de su graduación regresó a Kazajistán, pero en el fondo, sabía que regresaría a China. "Todo el mundo está buscando el mercado chino. Nadie puede permitirse ignorarlo", expresó.
La planta de Oil empezó su producción en julio del año pasado, exenta de impuestos y del impuesto al valor agregado por ubicarse en la zona franca.
"Abriremos una fábrica de harina y una granja avícola cercana a la planta y traeremos más productos agrícolas de calidad desde Kazajistán", comentó.