BEIJING, 2 mar (Xinhua) -- A pesar del aumento de los costos laborales, de los terrenos y logísticos, los manufactureros chinos afrontan un momento de oportunidad.
Los salarios medios en la industria fabril de China se han elevado por encima de los promedios en los países de América Latina y se aproximan al 70 por ciento del nivel de ciertos países menos desarrollados de la eurozona, de acuerdo con los datos de Euromonitor International, un grupo de investigación.
Las empresas en China también se enfrentan a costes logísticos más altos, que llegan a representar casi el 30 por ciento del coste total de producción, y son notablemente superiores con respecto a la media de entre el 10 y el 15 por ciento en los países desarrollados.
El sector manufacturero de China está bajo presión, con las fábricas trasladando la producción intensiva en mano de obra a países con menores costes y a naciones desarrolladas que aspiran a actualizar sus industrias, explicó Xu Zhaoyuan, investigador del Centro de Desarrollo e Investigación del Consejo de Estado.
Sin embargo, sería un error si se subestimaran las ventajas competitivas del sector manufacturero de China.
Pese a los elevados costos de producción y transporte, los fabricantes en China se benefician de un creciente apetito del país por productos de alta gama y los esfuerzos del gobierno a la hora de reducir los cobros e impuestos.
"Más allá del coste, la competitividad en el sector manufacturero trata también del capital humano, el desarrollo de las infraestructuras y el tamaño del mercado", indicó Xu.
Quedan en el pasado los días cuando los fabricantes prosperaban ofreciendo baratos productos de una calidad mediocre. Los cada vez más pudientes consumidores chinos están interesados en adquirir mercancías de gama alta, como inodoros inteligentes y vehículos de nueva energía.
Tras dejar atrás el estereotipo de una fabricación china anticuada, el sector está buscando incorporar tecnologías avanzadas y crecer mediante la innovación, de acuerdo con una encuesta publicada por Deloitte el año pasado.
Hace dos años, China anunció su plan "Hecho en China 2025" para ayudar al sector manufacturero a escalar en la cadena de valor promoviendo el desarrollo en diez sectores clave, entre ellos los equipos médicos y la robótica.
En consecuencia, la semana pasada el gobierno desplegó una serie de proyectos diseñados para desarrollar la mano de obra especializada para atender el crecimiento del sector.
El valor añadido industrial de China en el sector manufacturero se expandió un 6,8 por ciento interanual en 2016, con la fabricación de alta tecnología y de equipos registrando un incremento interanual del 10 por ciento.
El fomento de la economía real, en particular de la industria manufacturera, es una prioridad en la agenda de la labor gubernamental para 2017.
El liderazgo central del país destacó el martes la calidad como un elemento sustancial a la hora de revitalizar el sector, instando a que la industria manufacturera optase por mejorar esta cuestión en vez aumentar la producción.
Mientras tanto, China canalizará más energía en reducir los precios y cobros administrativos en los sectores monopolizados al mismo tiempo que se compromete a rebajar las cargas tributarias a las empresas.
Desde 2013, el gobierno central ha eliminado o disminuido aproximadamente 500 cobros administrativos a las compañías. Tan solo en 2016, la reforma que reemplazó el impuesto de operación comercial por la tasa de valor agregado ha reducido las imposiciones tributarias a las empresas en más de 500.000 millones de yuanes (72.700 millones de dólares).
Por otro lado, se están proyectando más zonas de libre comercio con menos papeleo administrativo y más políticas preferenciales para empresas domésticas y extranjeras.
El máximo órgano de planificación económica del país aseguró el mes pasado que China continuará animando a la inversión foránea a entrar en el sector manufacturero nacional ofreciendo más terrenos para uso industrial a precios rebajados.
Gracias a una fuerte demanda, a unos profesionales talentosos y al continuo apoyo gubernamental, China está bien posicionada para convertirse en una de las naciones manufactureras más avanzadas del mundo hacia 2049, predijo Xu.