Cooperación China-Venezuela traza nuevos desafíos en virtud del desarrollo

Actualizado a las 24/02/2017 - 13:33

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Por Victoria Argüello

CARACAS, 23 feb (Xinhua) -- La buena salud de la que goza el esquema de financiamiento entre China y Venezuela quedó recientemente en evidencia, con la firma de 22 nuevos acuerdos orientados a fortalecer la Asociación Estratégica Integral a que ambas naciones elevaron en el año2014.

Venezuela, que atraviesa un proceso de difícil recuperación económica, cuenta con el apoyo del gigante asiático para nuevas grandes tareas, dentro de las cuales preside esta lista la diversificación de su aparato productivo a través de la "Agenda Económica Bolivariana", una serie de 15 áreas estratégicas para el desarrollo.

Dentro de las novedades de los acuerdos está que Beijing cooperará ahora con el país sudamericano en inversiones para la Gran Misión Abastecimiento Soberano (GMAS) y la política alimentaria CLAP, cuando la nación latina enfrenta una fuerte escasez de productos en lo que el gobierno ha identificado como una "guerra económica".

Sigue siendo el horizonte común de ambas naciones apuntar al ámbito estratégico de las exportaciones venezolanas, consolidar ambos mercados, promover la innovación tecnológica y la generación de valor agregado en los productos locales pero sobre todo, evolucionar la cooperación en el área energética.

En entrevista exclusiva con Xinhua, el ministro venezolano de Planificación y Conocimiento, Ricardo Menéndez, calificó la relación sino-venezolana como un "auténtico proceso de integración" que prevé un fortalecimiento infinito encaminado a un mejor futuro para ambas naciones.

"Todo se circunscribe a un marco estratégico entre nuestros países y tiene que ver con el Plan Venezuela-China al 2025, hablamos de vincular el plan quinquenal de China con el Plan de la Patria (Ley venezolana) y el Plan Campaña Carabobo. Es una relación que tiene un profundo aliento", expresó Menéndez.

El ámbito de mayor trascendencia en esta cooperación sigue siendo el energético, abarcando éste seis de los nuevos 22 acuerdos, con lo cual se aspira a trascender el mero enfoque comercial de las actividades petroleras para trabajar ahora en aspectos de diseño de arquitectura orientados a incrementar la producción.

Uno de los más interesantes es la instalación de la Refinería de Nanhai en la provincia de Guandong (sureste) que se especializará en el procesamiento de 400.000 barriles de crudo extrapesado extraídos a su vez por empresas mixtas dirigidas por Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y la Corporación Nacional de Petróleo de China (CNPC).

Otro proyecto dirigido a la expansión del volumen involucra a la empresa mixta Sinovensa radicada en la Faja Petrolífera del Orinoco "Hugo Chávez Frías" en el oriente venezolano, en la cual se prevé elevar la producción de crudo de 165.000 barriles por día (MBD) a 230 MBD.

En tanto, las mixtas Petrozumano y Petrourica, instaladas también en la Faja subirán sus niveles de volumen a 15 MBD cada una, para impactar en una generación total de 105 MBD.

Los resultados de estos convenios empiezan a verse durante el primer trimestre de este 2017, mientras que otros, apuntó el ministro, culminarán su meta dentro del próximo año o en 2019, acorde a las particularidades de cada empresa.

La cooperación energética se pierde de vista al evaluarse también, no dentro de estos nuevos 22 acuerdos, la creación de un puerto de aguas profundas en la península de Araya, estado Sucre (oriente) junto a una red de oleoductos y gasoductos en la Faja Petrolífera.

"Se rompe esa matriz, de visión, de Venezuela como país de no inversión [...] esto más las inversiones petroleras, están hablando precisamente de la confianza que prevalece en nuestros países y cómo vamos a abordar todas las dificultades que tengamos y como nos vamos a enrumbar hacia el futuro", dijo el titular.

Pero también la cooperación estratégica China-Venezuela comienza a divisar otras áreas estratégicas relacionadas al sector agrícola y alimentario, con la instalación de capacidades productivas en su mayoría excedentarias del país asiático.

Ambos países esperan construir un Complejo Agroindustrial de Fábrica de Fábricas en el municipio Anaco del estado Anzoátegui (este) que ambiciona erigirse como el complejo de su tipo más grande de toda Latinoamérica.

"Esto está vinculado con el tema de las semillas, fertilizantes, agroquímicos, con variables desde el punto de vista ambiental, donde vamos perfilando nuevas áreas en función de nuestro desarrollo", agregó Menéndez.

El apalancamiento industrial de Venezuela pasa también por la articulación con China para fortalecer la producción de hierro, acero, aluminio, cemento, vidrio y materiales de construcción adicionalmente del sector automotriz y las maquinarias que se requieren para el desarrollo de las obras públicas.

Lo que se vislumbra es allanar el camino para una consolidación progresiva de las industrias básicas, medias e intermedias y pesadas de Venezuela, mediante el incremento de las materias primas.

No obstante, empresas operativas mixtas ya se encuentran en el nivel de evaluar posibilidades de expansión de sus líneas de producción y de encaminarse hacia nuevos mercados mediante las exportaciones.

Dentro de éstas figuras el acuerdo número 12 de la reciente Comisión China-Venezuela que involucran a la empresa mixta Venezolana de Industrias Tecnológicas, C.A (VIT) y la china Inspur Group Co. Ltd, en aras de incrementar el ensamblaje de computadoras y otros equipos tecnológicos con miras a la exportación.

En el caso de las fabricantes de teléfonos móviles Venezolana de Telecomunicaciones, C.A (VTELCA) junto con ZTE (H.K.) Limited "están en expansión otras cinco líneas adicionales de producción", refirió Menéndez, quien también señaló el inicio de una segunda planta de la Industria Electrónica Orinoquia, S.A en la Zona Económica de Paraguaná, en el estado Falcón (norte).

Además, figura el fortalecimiento la empresa automotriz Chery de Venezuela para encaminarla en la colocación de sus productos en las ciudades de las cuatro Zonas Económicas Especiales, un proyecto gubernamental de desarrollo territorial vinculado a las potencialidades de los distintos puntos de la geografía venezolana.

"En el caso de Chery, lo que tiene que ver con el procesamiento de taxis, que es una de las producciones nacionales, está articulando además con el plan de producción 2017, que contempla como generamos una base de exportación desde la producción local", añadió.

La tarea de la diversificación económica de Venezuela ha arrojado como resultado el proyecto del Arco Minero del Orinoco, en el que el país se perfila como una reserva importante de oro, bauxita, coltán, cobre y diamante, y en cuyo proceso de extracción también participarán las empresas chinas.

Para ello, se definió una "hoja de ruta" que evaluará la participación de dichas unidades productivas con miras a establecer una gran empresa mixta en el ámbito de la minería. De acuerdo con Menéndez, los primeros resultados de esta hoja de ruta comenzarán a notarse durante el primer semestre del año corriente.

En más de 15 años de cooperación estratégica, Venezuela y China han suscrito cerca de 500 convenios, que le han permitido por un lado a la nación sudamericana diversificar sus alianzas comerciales y políticas, y al gigante de Asia incrementar su presencia en la región.

La estrecha relación, que aspira incorporar a cada vez más áreas incluyendo el turismo, se pierde de vista enfocándose en lazos cónsonos con el establecimiento de un mundo multipolar.