Los jefes de gobierno de países europeos y africanos, junto con delegados de organizaciones regionales e internacionales, se reunieron hoy en Malta para una cumbre de dos días sobre migración.
El mismo día, al menos 14 personas se ahogaron después de que su embarcación naufragó cerca de la costa de Canakkale, en el oeste de Turquía.
Los delegados fueron recibidos esta tarde por el primer ministro de Malta, Joseph Muscat, y por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, en el Auberge de Castille.
Un nuevo monumento fue erigido en medio de la plaza frente al Auberge de Castille para simbolizar la unidad entre Europa y Africa.
La iglesia de Nuestra Señora de la Victoria tocó las campanas para marcar el inicio de un minuto de silencio en memoria de los miles de migrantes que partieron de sus países en busca de una vida mejor, pero que perecieron en su travesía hacia Europa.
La cumbre fue inaugurada por Muscat, quien habló del papel histórico de Malta como puente entre Europa y Africa. El primer ministro también enfatizó que el Fideicomiso Europeo que será puesto en marcha el día siguiente mostrará que Europa cree en el potencial de Africa y su compromiso de trabajar con el continente.
La Cumbre de La Valetta sobre Migración, a realizarse el 11 y 12 de noviembre en el Centro de Conferencias Mediterráneo en La Valetta, fue convocada primero por el Consejo Europeo en abril pasado. El objetivo de la cumbre es seguir avanzando a partir de la cooperación existente entre Europa y Africa.
El encuentro reúne a los Estados miembros de la UE, a otros 38 países participantes en los procesos de Rabat y Jartum del diálogo Unión Europea (UE)-Africa y a representantes de las comisiones de la UE y la Unión Africana, de la ONU y de la Organización Internacional para las Migraciones.
La cumbre se centrará en cinco ámbitos específicos: abordar las causas de raíz para ayudar a crear paz, estabilidad y desarrollo económico; mejorar el trabajo de promoción y organización de canales de migración legal; ampliar la protección de migrantes y solicitantes de asilo, particularmente de grupos vulnerables; abordar de forma más eficiente la explotación y tráfico de migrantes; y trabajar más estrechamente para mejorar la cooperación en regreso y readmisión.