WASHINGTON, 19 ago (Xinhua) -- Las cosas no se ven tan bien para la candidata presidencial demócrata Hillary Clinton, quien no hace mucho era considerada la única contendiente demócrata viable para la Casa Blanca en 2016 y ahora se ve asediada ahora por los escándalos y los candidatos rivales.
En efecto, el aspirante demócrata, el senador Bernie Sanders, aplastó a Clinton en días recientes en una encuesta no oficial realizada entre los asistentes a la Feria Estatal en el estado de Iowa, un campo de prueba para un montón de candidatos que acudieron recientemente al evento de varios días de duración en un intento por atraer la atención de los medios y del público estadounidense.
Sanders superó a Clinton con 49 contra 45 por ciento en la encuesta y siguió atrayendo grandes multitudes en las últimas semanas, dado que ha aprovechado el fervor en contra del sistema del ala progresista del Partido Demócrata.
Los analistas dicen que Clinton debe tener cuidado de no subestimar a Sanders y afirman que es probable que los estrategas de campaña le aconsejen responder pronto y de forma contundente. A su vez, Sanders ha estado robando atención a Clinton en las últimas semanas, ha estado atrayendo a grandes multitudes y la ha estado eclipsando en los medios.
El senador ha brillado más que Clinton por su autenticidad, un importante factor de atracción para muchos electores estadounidenses, y ha abordado asuntos como la desigualdad de los ingresos, algo que atrae al ala progresista del Partido Demócrata.
"Sanders tiene un conjunto de principios coherentes y parece increíblemente auténtico en su intento de presionar por un futuro político más progresista. Su campaña también es literalmente un movimiento de abajo hacia arriba que tiene gran atractivo", dijo a Xinhua Julian Zelizer, profesor de Historia y Asuntos Públicos de la Universidad de Princeton.
Clinton, en contraste, siempre ha batallado con su imagen pública y a menudo da la impresión de que es rígida, de que está fuera de lugar entre los estadounidenses comunes y corrientes y de que es poco auténtica.
A diferencia de su simpático esposo, el ex presidente Bill Clinton, Hillary ha menudo ha trastabillado en sus intentos por relacionarse con los votantes comunes y corrientes. E incluso entre sus simpatizantes, el nivel de entusiasmo no iguala en este momento al de los simpatizantes de Sanders, quien está reuniendo enormes multitudes.
"El mayor peligro para Clinton es que Sanders gane por anticipado en Iowa y New Hampshire y que genere una especie de impulso que resulte en una dura contienda en las primarias", dijo Zelizer. "Esto puede socavar más del entusiasmo de su campaña en general y exponer más debilidades en la campaña".
Clinton ya ha subestimado a Sanders, dijo Zelizer, y sus simpatizantes no anticiparon el tipo de fervor que surgiría detrás de la campaña de Sanders.
Además de Sanders, se ha hablado de que el vicepresidente Joe Biden entrará a la contienda para conseguir la nominación demócrata. Aunque es probable que Biden no represente una amenaza importante para Clinton, el vicepresidente es un elemento más que puede mermar su esfuerzo por la nominación.
Y luego está el escándalo de los correos electrónicos. La Oficina Federal de Investigación está analizando si se manejó de forma errónea información clasificada porque Clinton utilizó su cuenta privada de correo electrónico y un servidor privado cuando se desempeñó como secretaria de Estado del presidente Barack Obama.
De todas formas, Clinton sigue a la cabeza de todos los candidatos, ya sean demócratas o republicanos, en las recientes combinaciones de enfrentamiento uno a uno de Real Clear Politics.
Clinton supera en estos momentos con 47 por ciento a Sanders, quien tiene 29 por ciento. Clinton también aventaja por seis puntos al magnate multimillonario y favorito entre los republicanos, Donald Trump, y supera por nueve puntos al ex gobernador de Florida, Jeb Bush, también hermano del ex presidente George W. Bush.
En cuanto a los puntos fuertes para el equipo de Clinton, la aspirante demócrata tiene una marca reconocida a nivel nacional e internacional y es probable que consiga los votos de las mujeres solteras, así como de los electores hispanos y afroamericanos, aunque los recientes acontecimientos han mostrado que cualquier cosa puede cambiar en esta aparente contienda inusual por la Casa Blanca.