Desde 1986, el Nobel de Literatura presidía la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano, que tiene su sede en La Habana.
Muchas obras cinematográficas mexicanas de la década de los años 60 fueron escritas por García Márquez, quien, al igual que muchos intelectuales de la época, firmó los guiones con seudónimo.
Entre las películas destacan "El gallo de oro" (1964), y "Tiempo de morir (1966).
La primera, basada en el cuento homónimo de Juan Rulfo, coescrita con el escritor mexicano Carlos Fuentes. La segunda, un western filmado inicialmente por Arturo Ripstein.
En 1990, camino a Japón, hizo una escala en Nueva York para conocer al director estadounidense cuyos guiones admiraba: Woody Allen.
La razón de su viaje al país era la de encontrarse con Akira Kurosawa, quien en ese momento rodaba "Los sueños".
García Márquez estaba interesado en llevar al cine la historia de "El otoño del patriarca", ambientado en el Japón medieval.
En 1991, la televisión colombiana produjo "María", la novela de Jorge Isaacs, adaptada por García Márquez junto con Lisandro Duque Naranjo y Manuel Arias.
En 2006 se rodó "El amor en los tiempos del cólera", con guión del sudafricano Ronald Harwood y bajo la dirección del británico Mike Newell.
En marzo de 2010, y en el marco del festival de cine de Cartagena de Indias, se estrenó la versión fílimica de "Del amor y otros demonios", coproducción entre Colombia y Costa Rica, dirigida por la costarricense Hilda Hidalgo.
El narrador y periodista, radicado en México hasta su muerte, obtuvo numerosos reconocimientos, además del Nobel de Literatura en 1982 y el Rómulo Gallegos 1972.
Entre ellos: el doctorado honoris Causa de la Universidad de Colombia en Nueva York (1971); Premio Jorge Dimitrov por la Paz (1979); Medalla de la legión de honor francés en París (1981).
Además, la condecoración Aguila Azteca en México (1982); Premio 40 años del Círculo de Periodistas de Bogotá (1985), así como miembro honorario del Instituto Caro y Cuervo en Bogotá (1993), entre otros.
García Márquez llevó una cercana amistad con el presidente cubano Fidel Castro, y en 1959 fue corresponsal de la agencia de noticias Prensa Latina, creada por el gobierno cubano después del comienzo de la revolución cubana para informar sobre los acontecimientos en Cuba.
También mantuvo amistad con los grandes escritores colombianos de su generación, la del boom latinoamericano y el realismo mágico, como el argentino Julio Cortázar, el peruano Mario Vargas Llosa y los mexicanos Juan Rulfo y Carlos Fuentes.
Participó como mediador en las conversaciones de paz entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el gobierno colombiano que tuvieron lugar en Cuba y entre el gobierno de Belisario Betancourt y el grupo M-19.
Gabriel García Márquez fue famoso tanto por su genio como escritor, así como por su postura política con inclinación por la izquierda.
Este jueves, la prensa de todo el mundo difundió la noticia: la voz más reconocida de las letras en español de la segunda mitad del siglo XX había muerto en su casa del sur de la Ciudad de México, rodeado por su familia.
Se apagaron 87 años de imaginación.