Hasta el momento, las dos partes involucradas no han logrado encontrar elementos en común en la actual ronda de conversaciones y ninguna de las partes ha suavizado su tono.
El gobierno insiste en cesar la violencia y el terrorismo como principal prioridad y la oposición busca el establecimiento de un órgano rector de transión con poderes ejecutivos plenos y sin la presencia de Bashar al-Assad.