El presidente de Afganistán, Hamid Karzai, emitió hoy un decreto que prohíbe a las fuerzas de seguridad del país pedir apoyo aéreo a las fuerzas extranjeras apostadas en el país.
"El Ministerio de Defensa, el Ministerio del Interior y la Dirección Nacional de Seguridad (DNS), o agencia de inteligencia, en cualquier situación durante sus operaciones, no deben solicitar un ataque aéreo a las fuerzas extranjeras", dice el comunicado emitido por la oficina de Karzai.
Karzai emitió el decreto días después de que un bombardeo de la OTAN cobrara la vida de 10 civiles en la provincia de Kunar, este del país.
El ataque, supuestamente solicitado por la DNS, ocurrió el martes pasado y entre los muertos había cuatro mujeres, cinco niños y un hombre de la provincia que se localiza a 185 kilómetros al este de Kabul. No obstante, el ataque también cobró la vida de cuatro militantes, señalaron funcionarios de la provincia.
Actualmente más de 100.0000 soldados extranjeros, de ellos 66.000 estadounidenses, están desplegados en Afganistán para combatir la insurgencia dirigida por el Talibán.
Bajo el plan de retirada del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, 33.000 soldados de su país ya fueron retirados de Afganistán en septiembre pasado y otros 34.000 regresarán a casa antes de un año. La mayoría de las fuerzas de la coalición dejará Afganistán para fines del 2014.