(SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Ya se van conociendo los detalles del plan elaborado por un equipo dirigido por el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, para reforzar los controles sobre las armas de fuego en Estados Unidos y también que en este caso el presidente Barack Obama no tendrá que sortear el duro obstáculo de un Congreso dominado por los republicanos para sacarlo adelante. Si le parece bien, el mandatario lo puede aprobar por decreto.
En total, la propuesta de Biden comprende 19 medidas, entre ellas reforzar la implementación de leyes sobre armas ya existentes y autorizar a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) a hacer una investigación a nivel nacional sobre la salud mental de quienes poseen armas de fuego.
Luego de reunirse el lunes con el vicepresidente y otros congresistas para abordar el tema, el legislador demócrata Mike Thompson, señaló que el Gobierno podría exigir incluso a las agencias que proporcionen información sobre antecedentes que deben acompañar las ventas de armas, para asegurarse de que la regulación es “lo más completa posible”.
Sin embargo, otro legislador oficialista, Bobby Scott, quien también estuvo en el encuentro en el que se analizaron las propuestas, señaló que las 19 medidas no incluyen cambios en la legislación, como sí sería necesario para una prohibición de los rifles de asalto.
“Todo se centró en aplicar las leyes actuales, administrar cosas como mejorar la base de datos de antecedentes. Cosas como esa, que no implican cambiar la ley, sino aplicarla, y asegurarnos de que la ley actual se administra lo mejor posible”, abundó.
En la reunión se recomendó además designar finalmente al director de la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas, que lleva seis años sin un jefe permanente.
Obama encargó a Biden elaborar un plan para reforzar el control de las armas de fuego después de la masacre de Newtown, donde hace un mes un joven mató a 27 personas, entre ellas 20 niños pequeños, antes de suicidarse. La decisión del mandatario sobre la propuesta de su mano derecha será anunciada este jueves, adelantó Jay Carney, portavoz de la Casa Blanca.
Más rápido parecen ir las cosas en Nueva York, donde este martes las autoridades del estado endurecieron las normas para la posesión de armas de fuego de todo el país, centradas en las armas de asalto y los cargadores de alta capacidad.
Tanto la Cámara como el Senado estatal aprobaron por amplia mayoría las medidas promovidas por el gobernador Andrew Cuomo, en respuesta a la matanza de Newtown (Connecticut), que incluyen extender la definición de armas de asalto, de forma que se prohíben las pistolas semiautomáticas y los rifles con cargadores separados, así como las escopetas semiautomáticas, siempre que tengan alguna característica técnica militar (como los sistemas para impedir los destellos de los disparos o el mango antideslizante).
Un despacho de EFE añade que los habitantes del estado que ya posean legalmente armas de estas características podrán mantenerlas, pero deberán registrarse obligatoriamente ante las autoridades. Otra medida importante es la prohibición de todos los cargadores con capacidad para más de siete balas.
También se endurecen las penas para quienes trafiquen ilegalmente con armas o cometan delitos con armas de fuego.
Finalmente, los profesionales de la salud deberán comunicar a las autoridades cuándo consideran que una persona sufre problemas mentales que la hacen potencialmente peligrosa.