El estado de Santa Catarina, sur de Brasil y fronterizo con Argentina, vivió en las últimas horas una intensa ola de violencia callejera que dejó un hombre muerto por disparo de arma de fuego y un autobús en llamas, confirmó hoy la policía.
Una persona murió y otras 20 fueron detenidas la pasada noche por su presunta participación en la ola de violencia, la segunda en tres meses en este estado. Recién en noviembre la entidad registró 60 ataques similares en siete días.
El gobierno regional de Santa Catarina elevó el número de efectivos policiales para contener la violencia, que desde el miércoles registra más de 40 ataques a autobuses, camiones y vehículos, además de edificaciones policiales.
El domingo a la noche, un autobús fue incendiado en la ciudad de Navegantes y otro fue blanco de disparos de arma de fuego por encapuchados en Itajaí sin que se registraran víctimas mortales, según el balance policial.
El caso en Navegantes elevó a 18 el número de autobuses de servicio público incendiados en los últimos cinco días por grupos criminales.
Además de reforzar la presencia de uniformados en las ciudades más afectadas por los ataques, la policía dispuso la custodia de autobuses.
Las autoridades atribuyen los ataques a las acciones policiales contra las bandas de narcotraficantes y al endurecimiento del trato de los presos encarcelados en el estado.
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