Washington acusó a Snowden de espionaje y robo de propiedad gubernamental luego de que a principios de junio reveló los programas secretos de vigilancia masiva telefónica y de Internet de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
El Departamento de Estado de Estados Unidos derogó su pasaporte, acción que le dificultó viajar a otros destinos sin documentos de viaje.