"Tenemos mucha gente herida y hay muchas personas, estoy seguro, que no estarán aquí mañana", dijo a los reporteros el alcalde de West, Tommy Muska. "Vamos a buscar a todos. Nos aseguraremos de conocer la suerte de todos. Eso es lo más importante ahora".
El vocero del Departamento de Seguridad Pública de Texas, D. L. Wilson, dijo a la prensa que entre 50 y 70 casas resultaron dañadas por la explosión e incendio y que casi la mitad del pueblo, entre ocho y 10 manzanas, han sido evacuadas.