La prevención contra la desertificación y el eficiente control de la arena transforman Xinjiang

Los árboles de Populus euphratica en el condado de Xayar, región autónoma de Xinjiang Uygur. [Foto: VCG]

Una vez dominado por tierras áridas y dunas migratorias, el condado Xayar es ahora el hogar de plantas resistentes a la sequía como el populus euphratica y el saxaul. Décadas de sostenidos esfuerzos en la prevención contra la desertificación y un eficiente control de la arena han dado sus frutos.

Ubicado en el borde norte del desierto de Taklimakan, Xayar cuenta con el populus euphratica virgen más grande y mejor conservado del mundo, que se extiende a lo largo del río Tarim.

"En la zona de demostración de prácticas de prevención y control de la arena, hemos cultivado cinco tipos de especies de arbustos, incluyendo el saxaul. Junto a institutos de investigación también hemos desarrollado métodos de cultivo ecológico para Cistanche deserticola", destacó Wang Kaiyan, subdirector del Centro de Protección de Populus Euphratica en Xayar.

"El rendimiento anual actual de Cistanche deserticola por mu ha alcanzado los 300 kilogramos, ayudando a más de 1,000 residentes locales a encontrar empleo y aumentar sus ingresos", agregó.

Como área clave en la parte alta del río Tarim, Xayar desempeña un papel crucial en el proyecto de restauración del populus euphratica.

"Desde 2016 hasta 2024, el condado ha ofrecido 689 millones de metros cúbicos de agua para irrigar más de 200,000 hectáreas de bosque de populus euphratica", afirmó Qiang Limin, director del Centro en Xayar.

"Este año, tenemos como objetivo liberar 71 millones de metros cúbicos de agua para irrigar 200,000 mu de bosque de populus euphratica", agregó.

Esta tecnología también proporciona un fuerte impulso para los esfuerzos de restauración.

Li Zhijun, profesora en la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Vida en la Universidad de Tarim, por más de una década ha investigado la populus euphratica. A través de un control preciso del agua y la nutrición, gestión inteligente y sistemas de producción de plántulas estandarizados, Li y su equipo han reducido el período de cultivo de plántulas de 2-3 años a cerca de un año.

"Estamos aplicando tecnología de edición genética y biología sintética para desarrollar nuevas variedades con mayor resistencia al estrés y una adaptabilidad ecológica más amplia”, asegura Li.

“Nuestro aporte contribuye con nuevas soluciones científicas a la protección de la biodiversidad y la seguridad ecológica en las regiones áridas del mundo", concluyó.