Brasil refuerza defensa de exploración petrolera y avanza en reforma del sector eléctrico

Imagen del 4 de marzo de 2022 de la sede de la petrolera Petrobras en Río de Janeiro, Brasil. (Xinhua/Wang Tiancong)

El Gobierno brasileño reiteró hoy su deseo de explorar petróleo en la región llamada Margen Ecuatorial, en la región amazónica, y defendió que el país no puede renunciar a la producción de combustibles fósiles.

"El petróleo no es una cuestión de oferta, sino de demanda. Mientras el mundo siga demandando petróleo, tendremos que garantizar su oferta", afirmó en una conferencia el ministro de Minas y Energía, Alexandre Silveira.

Silveira enfatizó que los ingresos generados por la explotación petrolera deben contribuir a financiar la transición energética, con el objetivo de evitar costos excesivos para el país en este proceso.

El ministro también anunció que el Ministerio de Minas y Energía (MME) presentará al Congreso una reforma del sector eléctrico brasileño, una iniciativa esperada para 2024. Además, señaló la posibilidad de realizar una subasta de transición energética para la contratación de plantas termoeléctricas impulsadas por biocombustibles, como el etanol.

Silveira destacó la necesidad de duplicar la capacidad del parque termoeléctrico de Brasil para 2034, asegurando fuentes de energía con mayor seguridad operativa. Para la subasta de reserva de capacidad prevista en junio, el gobierno ha vetado la participación de centrales térmicas que operan con carbón mineral, diésel o fuel oil. En su lugar, se permitirá la contratación de proyectos de generación termoeléctrica a gas natural y biocombustibles.

"La energía térmica es la que sostiene nuestro sistema en los momentos de mayor demanda", explicó Silveira.

El ministro señaló que la expectativa para la subasta es positiva, con una gran participación. "Ya tenemos registrados 327 proyectos. Claro, al final solo entre el 40 y el 50 por ciento de ellos siguen en la competencia, debido a exigencias como la garantía del suministro de gas. En total, son más de 70 GW", afirmó.

En cuanto al abastecimiento de gas natural, Silveira informó que Brasil y Argentina han firmado un acuerdo para la importación de gas producido mediante fracturación hidráulica (fracking).

El Gobierno brasileño estudia posibles rutas de transporte del recurso desde Argentina, incluyendo un gasoducto de aproximadamente 594 kilómetros que conectaría la oferta argentina con la central termoeléctrica de Uruguaiana, en el estado de Rio Grande do Sul. Sin embargo, señaló que la infraestructura actual presenta limitaciones para este proyecto.