Netanyahu y Biden conversan por teléfono mientras Israel amenaza con respuesta "letal" para Irán

Imagen del 1 de octubre de 2024 de proyectiles procedentes de Irán interceptados por Israel volando por el cielo sobre Jerusalén. (Xinhua/Chen Junqing)

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, conversó hoy miércoles con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden; la primera conversación desde agosto, en medio de las crecientes tensiones entre Israel y su archienemigo, Irán, se indicó en informes confirmados por la oficina de Netanyahu y de la Casa Blanca.

La conversación fue "directa" y "productiva", dijo más tarde en conferencia de prensa la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, quien agregó que los dos líderes "siguieron hablando sobre la respuesta de Israel al ataque (de Irán) de la semana pasada", pero no proporcionó detalles específicos.

Después de esta llamada de 30 minutos, en un video emitido por su oficina, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, amenazó con una respuesta "letal" al ataque del 1 de octubre de Irán que, de acuerdo con Teherán, fue realizado como represalia por los presuntos asesinatos de figuras claves de la resistencia, entre ellos el líder de Hamas Ismail Haniyeh y el líder de Hizbulá, Hassan Nasrallah.

El ataque de Irán incluyó cerca de 180 misiles balísticos y causó daños en varias bases aéreas y edificios habitacionales, aunque no se informó sobre víctimas.

Después de describir el ataque iraní como un fracaso, Gallant hizo una advertencia: "Nuestro ataque (de represalia) será letal, preciso y, lo más importante, sorpresivo. No entenderán lo que pasó ni cómo paso, pero verán los resultados".

Antes de la conversación telefónica entre Netanyahu y Biden, los medios israelíes informaron previamente que Netanyahu, junto con importantes funcionarios israelíes, tomó decisiones significativas con respecto al inminente ataque israelí contra Irán durante una reunión realizada el martes por la noche.

Citando fuentes de alto nivel, el diario Times de Israel indicó que el objetivo central de la respuesta israelí serían las instalaciones militares iraníes, aunque esta estrategia podría modificarse.