La locura de las tarjetas coleccionables: de un objeto de colección de moda a una moneda social para niños

La foto tomada el 14 de julio de 2024 muestra tarjetas de My Little Pony compradas por un estudiante de primaria en Anyang, provincia de Henan. Foto: VCG

Las tarjetas coleccionables de My Little Pony han ganado una inmensa popularidad entre los estudiantes de primaria en China. Las tarjetas se venden en formato de caja sorpresa, y las tarjetas más raras, conocidas como tarjetas de alto nivel, han alcanzado recientemente un precio de 160.000 yuanes (20.000 dólares) en el mercado secundario.

"Aunque los rumores afirman que algunas tarjetas tienen un precio tan alto, los precios de transacción reales son mucho más bajos. La mayoría de las tarjetas se venden por solo unas pocas o varias docenas de yuanes. Estos precios altísimos son en su mayoría publicidad creada para atraer la atención y generar tráfico, y las transacciones reales rara vez alcanzan tales cantidades", dijo Miao Cai, un vendedor en una plataforma de comercio en línea para juegos de cartas.

Hace unos años, cuando la locura por las tarjetas de Ultraman todavía era fuerte, las tarjetas de My Little Pony se convirtieron rápidamente en un nuevo coleccionable popular entre los estudiantes de primaria.

Este fenómeno se atribuye a la amplia gama de tarjetas y al método de venta en cajas ciegas, que ha atraído a muchos niños a comprarlas, coleccionarlas e intercambiarlas.

En las tiendas físicas, las papelerías y las jugueterías han exhibido de manera destacada las tarjetas de My Little Pony para satisfacer las demandas de los niños. Las plataformas en línea también presentan estas tarjetas de manera destacada, y algunos videoblogueros atraen a grandes audiencias al transmitir en vivo la apertura de paquetes de tarjetas.

Miao dijo que las tarjetas son tan populares porque los niños establecen conexiones dentro de sus grupos de pares al coleccionar e intercambiar tarjetas. "Aquellos que participan en el coleccionismo de tarjetas pueden integrarse más fácilmente en los círculos sociales, mientras que aquellos que no participan pueden quedar excluidos. Este mecanismo social lleva a los niños a convertirse en promotores autónomos de las tarjetas, con un mínimo de marketing adicional necesario por parte de las empresas", dijo Miao.

Miao señaló que la supuesta rareza de ciertas tarjetas aumenta su atractivo. "Los niños que poseen tarjetas más raras tienden a ganar más atención y admiración. Esta escasez e inversión financiera amplifican el valor percibido de las tarjetas".

"El proceso de abrir los paquetes de cartas está lleno de incertidumbre y anticipación. Los niños pueden seguir comprando cartas por curiosidad y por un sentido de aventura. Esta mentalidad es similar a la de los juegos de azar, ya que los niños suelen aferrarse a la creencia de que el próximo paquete puede contener una carta rara, lo que les hace difícil dejar de comprar", señaló Miao.

Los internautas en las redes sociales generalmente creen que, si bien coleccionar tarjetas refleja la curiosidad y la exploración de los niños, la obsesión excesiva puede afectar sus estudios y relaciones sociales. En lugar de prohibir por completo el coleccionismo de tarjetas, los padres pueden guiar a sus hijos para que comprendan la lógica comercial detrás de las tarjetas.

Las tarjetas de My Little Pony de una generación pueden eventualmente ser reemplazadas por nuevas tendencias, pero este fenómeno no es inusual. La clave es equilibrar los intereses con otros aspectos de la vida, evitar perseguir ciegamente modas pasajeras y mantener un consumo racional.