Su biquini de piel de ciervo en la comedia Hace un millón de años -en la que su personaje, la troglodita Loana, solo dice tres frases en toda la película- la convirtió en un sex symbol. Pero Raquel Welch, que ha muerto este miércoles a los 82 años, logró mantener ese siempre volátil título durante mucho más tiempo de lo habitual en estos casos, según El Mundo.
Ocho años después de representar a Loana, Welch ganaba un Globo de Oro a la mejor actriz en una comedia musical en Los tres mosqueteros. En la década de los 80, cuando por su edad -había nacido en 1940- los papeles de sex symbol empezaban a alejarse de ella, se subió a la moda del aerobic y a la explosión del vídeo doméstico para relanzar su carrera. Aun así, siguió interpretando, y en 1988 fue nominada al Emmy -el Oscar de la televisión- por el drama televisivo Derecho a morir.
Raquel Welch llegó al estrellato en un momento en el que Hollywood necesitaba desesperadamente a una sucesora de Marilyn Monroe. Sin duda, eso la ayudó decisivamente en los primeros tiempos de su carrera. Pero no es menos cierto que su firmeza de carácter es lo que le permitió estar en la cúspide durante dos décadas y media a pesar de que, como explica la web del New York Times en su obituario, "a lo largo de su carrera, la señora Welch recibió más admiración pública por su anatomía que por sus habilidades dramáticas".
Con todo, Welch corrió riesgos, como cuando protagonizó en 1970 Myra Breckinridge, una comedia basada en la obra del mismo título Gore Vidal en la que Hollywood afrontaba el entonces tabú del cambio de sexo. El filme recibió la calificación X, lo que significa que quedó relegado a un público muy minoritario y, lo que fue peor para el proyecto, fue descuartizado por los críticos.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)
