Un empleado trabaja en una planta en el distrito de Xiaoshan de Hangzhou, provincia de Zhejiang, el 27 de junio de 2022. [Foto: Xinhua]
Por Zhou Lanxu y Ouyang Shijia
Se espera que China acelere los esfuerzos sinérgicos para impulsar la demanda interna y fortalecer su sistema de suministro, como un paso clave para impulsar el desarrollo de alta calidad del país contra los persistentes vientos en contra en el país y en el extranjero, afirmaron expertos.
Los ajustes macroeconómicos deben intensificarse para expandir firmemente la demanda interna y estabilizar el crecimiento económico a corto plazo, al tiempo que se aseguran de que estos esfuerzos se combinen con la reforma estructural del lado de la oferta para mejorar la calidad y la sostenibilidad del crecimiento, explicaron.
Los comentarios llegan después de que el liderazgo del Partido Comunista de China (PCCh) y el Gobierno Central destacaran la necesidad de buscar un desarrollo de alta calidad integrando los esfuerzos para impulsar la demanda interna y optimizar el sistema de suministro.
En un informe entregado en la sesión de apertura del 20º Congreso Nacional del PCCh, Xi Jinping, secretario general del Comité Central del PCCh, destacó la necesidad de integrar la implementación de la estrategia para expandir la demanda interna, profundizando la reforma estructural del lado de la oferta.
Los expertos coinciden que dicha propuesta ha trazado el camino para que China garantice un crecimiento económico estable y eleve la calidad del desarrollo en los próximos cinco años, con un enfoque en expandir la demanda en áreas que están en línea con los objetivos de desarrollo de alta calidad y hacer coincidir la demanda con un sistema de oferta que esté mejor estructurado.
Cheng Shi, economista jefe de ICBC International, recalcó que esta integración se ha vuelto necesaria para impulsar la demanda interna porque la principal contradicción que enfrenta la sociedad china se ha trasladado desde un desarrollo desequilibrado e inadecuado hacia la necesidad cada vez mayor de una vida mejor para el pueblo.
“Cuando hay un desajuste entre la estructura de la oferta y la estructura del consumo, disminuye la efectividad de las políticas tradicionales para expandir la demanda interna”, recordó Cheng.
"En cambio, integrar la expansión de la demanda con la reforma del lado de la oferta puede ayudar a lograr un nuevo equilibrio en el que la demanda impulsa la oferta mientras que la oferta crea demanda", aseguró Cheng, quien espera que una mejor relación entre la oferta y la demanda pueda ayudar a mantener el crecimiento económico potencial anual de China entre 4,8 y 5,5 por ciento hasta 2025.
Y enfatizó que se deben hacer esfuerzos para facilitar la expansión del consumo rural y la mejora de la demanda de consumo de los residentes urbanos, al tiempo que se promueve la reestructuración industrial para satisfacer mejor esa demanda.
Los expertos también consideran que los esfuerzos para mejorar la interacción entre la demanda y la oferta pueden impulsar la búsqueda nacional dentro del nuevo paradigma de desarrollo, en el que el mercado interno es el pilar y los mercados nacionales e internacionales se refuerzan mutuamente, para fortalecer su resiliencia en medio de un entorno externo más volátil.
El viceprimer ministro Liu He destacó en un reciente artículo que la integración de la expansión de la demanda interna y la profundización de la reforma estructural del lado de la oferta es un plan a largo plazo para impulsar la autonomía del desarrollo, y citó la disminución de la demanda internacional y la inestable oferta mundial.
Al pedir esfuerzos para alinear los esfuerzos del lado de la demanda y la oferta con los requisitos de un desarrollo de alta calidad, Liu insistió que los ajustes macroeconómicos deben fortalecerse para mantener un crecimiento económico estable y sostenido, que desempeña un "importante papel fundamental" en el impulso de modernización del país.
“Debido a las olas de desglobalización y la desaceleración del crecimiento global, que ha comenzado a desacelerar las exportaciones de China, el país debería intensificar los ajustes macroeconómicos para impulsar la demanda interna que estabilicen el crecimiento”, reafirmó Luo Zhiheng, economista jefe de Yuekai Securities.
Si bien el crecimiento del PIB de China se recuperó en el tercer trimestre un 3,9 por ciento interanual, en octubre la actividad económica enfrentó nuevas presiones a medida que aumentaron los casos de COVID-19, las ventas minoristas se contrajeron respecto al año anterior y la inversión en desarrollo inmobiliario cayó a un ritmo mayor, informó la Oficina Nacional de Estadísticas.
Luo también manifestó que es sensato reducir las tasas de interés y el efectivo que los bancos deben mantener como reservas para lograr impulsar el consumo, estimular la inversión y aumentar el apoyo a la construcción de infraestructura. Y añadió que tales medidas para ampliar la demanda deben diseñarse de manera que contribuyan a la reforma estructural del lado de la oferta, como por ejemplo, los proyectos de infraestructura que se apoyarán deben ser aquellos que puedan ayudar a fortalecer la capacidad de la oferta a largo plazo.
A medida que los esfuerzos para combinar la expansión de la demanda con la reforma del lado de la oferta se fortalecerán la estabilidad económica y la resistencia del país, y puede crecer aún más el atractivo global de los activos financieros chinos.
Por su parte, Chris Liu, gerente principal de cartera de Invesco, una compañía global de gestión de inversiones, precisó que el crecimiento económico sigue siendo una prioridad crucial para China. En este sentido, hay optimismo en que el país logre un crecimiento moderado en los próximos años y, por lo tanto, brinde buenas oportunidades de inversión.
(Web editor: Zhao Jian, 周雨)
