Cosmonauta chino de respaldo siempre listo durante más de dos décadas

Pueblo en Línea  2021:10:19.15:07

El cosmonauta Deng Qingming. [Foto: Agencias]

Deng Qingming, un cosmonauta chino nacido en la provincia de Jiangxi, ha servido durante 23 años como miembro de respaldo de la tripulación espacial. Deng continúa listo en su puesto, activo para unirse a una misión en cualquier momento, informó CCTV este lunes.

Deng, de 55 años, nunca ha viajado al espacio. Fue miembro de la tripulación de respaldo para las misiones Shenzhou-9, Shenzhou-10 y Shenzhou-11.

Del primer grupo de 14 aprendices para el programa espacial, él estuvo entre los seis que nunca llegaron a integrar la tripulación. Cinco de sus compañeros se retiraron en 2014 sin haber podido realizar un vuelo espacial. Deng en el último hombre de esa hornada que tiene los ojos en el cosmos y los pies en la tierra.

"Ser una copia de seguridad no significa que no necesite trabajar. Debo observar de cerca desde el centro de control y, en caso de emergencia, ofrecer todo lo que sé sobre la misión y la nave espacial", afirmó Deng durante una entrevista. "Solo cuando la tripulación regrese a Tierra es que habré terminado mi misión".

"Ya sea como equipo o como respaldo, ese es nuestro trabajo", recordó Chen Quan, uno de los compañeros retirados de Deng, durante su ceremonia de jubilación. "¡No te rindas!"

Deng nunca olvidó esas palabras. No importa cuán difícil sea el camino hacia el vuelo espacial, nunca pensó en darse por vencido. Al final de cada misión, rápidamente despejaba su mente de distracciones y enfrentaba los nuevos desafíos con una actitud positiva.

En 2013, Deng pareció de un pequeño cálculo renal. Si bien esta no es una condición de preocupación inmediata en circunstancias normales, es diferente para los astronautas, que deben mantener un riguroso estándar de salud personal.

Deng se sometió a dos cirugías, la primera sin éxito. Después de sufrir de hematuria durante casi 2 meses con un tubo colocado dentro de su riñón, la piedra finalmente fue removida, reavivando su sueño.

Cuando se entrenaba para Shenzhou XI, lanzada en 2016, Deng junto con el miembro de la tripulación Chen Dong fueron confinados en un simulador de nave espacial de no más de 10 metros cuadrados durante 33 días. No tenían duchas, comieron exclusivamente comida espacial y soportaron ruidos fuertes y luz penetrante mientras intentaban dormir.

Sin embargo, Deng no fue el cosmonauta seleccionado.

"Entrenaron tan duro como nosotros, y son tan buenos como nosotros. Simplemente no tuvieron la oportunidad", admite Jing Haipeng, quien ha volado en tres misiones: Shenzhou VII, Shenzhou IX y Shenzhou XI.

"Pasaron sus mejores años preparándose y esperando. Han estado a la altura de su juramento. ¡Ellos también son héroes de nuestro país!", añadió.

"El éxito de la misión está por encima de mis deseos personales", subraya Deng, quien hasta el día de hoy todavía cree que puede tener una oportunidad y trabaja duro como cualquiera de sus compañeros de equipo.

La pasión de Deng ha inspirado a su hija Deng Manqi, que ahora trabaja en el control terrestre de Beijing.

"Mi padre es la persona más trabajadora y desinteresada que he conocido. Mi querido papá, siempre serás el héroe más grande", destacó Manqi en una carta a su padre. "Nuestra vida y nuestros sueños continuarán. Es un privilegio trabajar con ustedes".

Deng Qingming, junto con Li Qinglong, Wu Jie, Chen Quan, Zhao Chuandong y Pan Zhanchun, han dedicado más de dos décadas de su vida a entrenamientos regulares para asegurarse de estar listos para el llamado del país, incluso a sabiendas de que las posibilidades de participar en una misión disminuían a medida que envejecían.

Desde entonces, muchos se han retirado de los servicios activos y han sido transferidos a puestos de apoyo en el Centro de Astronautas de China.

Sin embargo, esos héroes anónimos no se arrepienten del paso al frente, demostrando una dedicación absoluta a la solemne promesa que hicieron hace más de 20 años.