BEIJING, 18 mar (Xinhua) -- El consejero de Estado y ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, dijo hoy que los virus no respetan fronteras, y que es la responsabilidad común de la comunidad internacional enfrentar y ganar la batalla contra los virus.
Wang hizo las declaraciones al sostener una conversación telefónica con el ministro de Relaciones Exteriores de Singapur, Vivian Balakrishnan, a petición del segundo.
Bajo el fuerte liderazgo y orientación personal del presidente chino, Xi Jinping, China ha movilizado a todo el país para llevar a cabo una guerra popular ardua de prevención y control de la epidemia de COVID-19, y la victoria ahora está a la vista, dijo Wang.
China fortalecerá la planificación y coordinación para consolidar completamente los logros alcanzados arduamente en la lucha del país contra la epidemia y adoptará múltiples medidas para prevenir la importación de casos de COVID-19, indicó.
Por otro lado, China impulsará la reanudación del trabajo y de la producción y restablecerá el orden del trabajo y la vida normal de una forma gradual, añadió.
Wang expresó la profunda preocupación de la parte china por la incidencia de COVID-19 en muchas fuentes y lugares de todo el mundo, y su fuerte empatía por las dificultades y desafíos que enfrentan algunos países.
Con un espíritu de apertura y transparencia en el primer lugar, China se ha mantenido en contacto con la Organización Mundial de la Salud y con la comunidad internacional, y ha hecho sacrificios enormes para prevenir que la epidemia se propague al exterior, lo que ha ofrecido tiempo valioso para varios países en la lucha contra la COVID-19 y hecho contribuciones significativas a la causa de salud pública global, expresó.
Wang dijo que China está dispuesta a fortalecer más la cooperación con la comunidad internacional y a poner en práctica el concepto de construcción de una comunidad de destino de la humanidad propuesto por el presidente Xi.
De una manera responsable, señaló, China compartirá activamente con varios países su experiencia en aspectos como prevención y control, así como en diagnóstico y tratamiento, enviará expertos médicos a los países que los necesiten, y ofrecerá ayuda de suministros médicos dentro de sus capacidades.
Wang añadió que China también abrirá canales de exportación de suministros médicos, aprovechará al máximo sus ventajas de capacidad y ayudará a atenuar la brecha de adquisición en los países pertinentes.
China está dispuesta, junto con Singapur, a fortalecer más la coordinación, explorar el establecimiento de un mecanismo conjunto de prevención y control, y participar en y defender la cooperación internacional y regional, indicó.
Wang enfatizó que la comunidad internacional necesita forjar un consenso en la lucha contra la epidemia en solidaridad bajo las circunstancias actuales.
Los intentos de estigmatizar la lucha de China contra la epidemia son despreciables y sólo dividirán a la comunidad internacional, lo que no es conducente a los esfuerzos conjuntos de todos los países para combatir la epidemia, ni útil para la prevención y control de la propagación de la epidemia domésticamente, agregó.
China aprecia la declaración reiterada del primer ministro singapurense, Lee Hsien Loong, de que el nuevo coronavirus no debe ser estigmatizado, y sus llamados para que todos los países colaboren en la lucha contra la epidemia, dijo Wang, quien añadió que China cree que Singapur seguirá manteniendo una postura justa a este respecto.
Balakrishnan, por su parte, felicitó a China por el control exitoso de la propagación de la epidemia en el país en un breve periodo, lo que ha acumulado una experiencia útil para la comunidad internacional, y dijo que esto es un logro destacado.
Indicó que China ha compartido su experiencia contra la epidemia con la comunidad internacional de una manera oportuna, enviado generosamente equipos de expertos médicos y abierto canales de exportación para los suministros médicos, lo que Singapur aprecia enormemente.
Desafortunadamente, añadió, algunos países han fracasado en hacer uso pleno del tiempo valioso que China ha ganado, lo que ha resultado en la propagación global de la epidemia.
Balakrishnan indicó que la mayor prioridad para Singapur y China es consolidar los logros en la lucha contra la epidemia, vigilar los riesgos de importación de COVID-19 y enfrentar de manera conjunta el impacto de largo plazo de la epidemia en salud pública y economía, políticas y sociedad, entre otros aspectos.
La prevención y control de la epidemia es un desafío común para la comunidad internacional, indicó, y añadió que Singapur nunca ha estado de acuerdo con la estigmatización de países específicos, un acto que no es conducente a la prevención y control de epidemia en los países afectados ni útil para la construcción de confianza y la cooperación entre varios países.
(Web editor: 吴思萱, 赵健)