Ghafoor añadió que helicópteros de visión nocturna de la armada pakistaní y un avión C-130 de la fuerza aérea pakistaní fueron prestados para trasladar los heridos a hospitales de Karachi.
Un numeroso contingente de la policía llegó al lugar de los hechos y lo acordonó para investigar el incidente.
El grupo terrorista mundial Estado Islámico (EI) reivindicó el ataque. En su sitio web árabe AMAQ, el EI indicó que un atacante suicida "hizo detonar su chaleco en el templo chiita de Lal Shahbaz Qalandar, en la provincia de Sindh, sur de Pakistán".
Esta es la segunda vez en los últimos tres meses que el EI se adjudica un ataque contra un templo pakistaní.