Restaurante de IKEA en Shanghai: sin consumir no puedes estar
Personas mayores socializan en un restaurante operado por el gigante sueco de muebles IKEA situado en el distrito Xuhui, en Shanghai. [Foto: Yin Liqin]
Shanghai,14/10/2016 (El Pueblo en Línea) - Un restaurante propiedad de IKEA, gigante sueco de la venta de muebles y artículos para el hogar, muy popular como lugar de encuentro entre las personas mayores de Shanghai, acaba de prohibir la estancia en el local si los clientes no consumen.
Desde hace una semana, IKEA prohibe a las personas que ocupen asientos si no se demuestra que están consumiendo. Desde entonces, las multitudes de entusiastas ancianos conversadores se ha reducido notablemente durante la hora del almuerzo, según comentó un guardia de seguridad.
Durante años, todos los martes y jueves por la tarde, muchas personas de avanzada edad inundaban el restaurante para reunirse y utilizar el local sin idea de consumir nada, en ocasiones hasta excediendo la capacida de 700 comensales.
Con una membresía de IKEA, que se puede obtener fácilmente presentando una carné de identidad, se puede degustar café gratis en este restaurante.
Durante las vacaciones del Día Nacional, los clientes se quejaron.
"Es una restricción razonable. En primer lugar, IKEA es una empresa con fines de lucro, no una organización de caridad”, opina Liu Shihao, estudiante de la Universidad Normal de Shanghai.
Y añadió que este miércoles, después que entró la ley en vigor, fue que pudo por primera vez en tres años encontrar un asiento para sentarse a almorzar.
Incluso algunos ancianos que frecuentaban el restaurante de IKEA están de acuerdo con la decisión.
"Es cierto que estamos aquí reunidos para socializar con nuestros compañeros, no para almorzar. Pero lo último que queremos es causar problemas y llegar a ser una desgracia para IKEA ", destacó un anciano de 76 años, nativo de Shanghai, que pidió ser identificado por Qiu.
Qui es un obrero retirado que, junto su esposa, visitaba tres veces a la semana el restaurante IKEA para socializar con sus conocidos.
En este restaurante propiedad de IKEA , una taza de café cuesta 5 yuanes para aquellos que no son socios, es decir, casi la mitad del precio que tienen muchos establecimientos de comida rápida en China y una sexta parte de lo que hay que pagar por un café en Starbucks.
Pero Qiu defiende que no son las gratuidades lo que hizo tan popular al restaurante IKEA en Shanghai.
"Hemos estado en McDonalds y KFC, pero allí casi no hay personas de nuestra edad", admite Qiu. "Nos sentimos como extranjeros, rodeados de tantos jóvenes. Si hay otro lugar en Shanghai donde podamos reunirnos con personas de nuestra edad, claro que estamos dispuestos a pagar dos veces más".
La pareja de ancianos conoció el restaurante IKEA hace dos años , cuando un joven vecino le sugirió que buscaran amigos allí.
Una encuesta reciente, realizada por la Universidad Renmin, demostró que la mitad de las personas mayores por encima de los 60 años en China viven solos, y una cuarta parte de ellos padecen de soledad.
(Web editor: Elena G., Rocío Huang)