Oficina de Información del Consejo de Estado
de la República Popular China
Julio del 2016
Índice
Prefacio
I. Las islas del Mar Meridional de China son territorio inherente de China
II. Origen de las Disputas Relevantes entre China y Filipinas en el Mar Meridional de China
III. China y Filipinas han alcanzado el consenso sobre la solución de las disputas en el Mar Meridional de China
IV. Filipinas ha tomado una y otra vez acciones conducentes a complicar las disputas
V. La política de China para con la cuestión del Mar Meridional de China
Prefacio
1. Situado al sur del continente de China y conectado a través de estrechos o vías acuáticas angostos con el océano Pacífico por el este y con el océano Índico por el oeste, el Mar Meridional de China es un mar semicerrado que se extiende en dirección noreste-suroeste. Al norte se une con la parte continental y la isla de Taiwan de China; al sur, con la isla de Kalimantan y la isla de Sumatra; al este, con las islas Filipinas y, al oeste, con la península Indo-China y la península Malaya.
2. Las islas del Mar Meridional de China incluyen el archipiélago Dongsha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha y el archipiélago Nansha. Estos archipiélagos están compuestos por islas, islotes, arrecifes, bancos de arena y cayos, de diferentes números y tamaños. El archipiélago Nansha es el mayor de ellos tanto por la cantidad de islas y arrecifes como por la esfera geográfica que abarca.
3. El pueblo chino inició sus actividades en el Mar Meridional de China hace más de 2.000 años. China fue el primer país en descubrir, nombrar, explorar y explotar las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes, y también fue el primero en ejercer una soberanía y jurisdicción continua, pacífica y efectiva en esta área. La soberanía de China sobre las islas del Mar Meridional de China y sus derechos e intereses pertinentes en el Mar Meridional de China han sido establecidos en un largo proceso histórico y disponen de plenos funda
mentos históricos y jurisprudenciales.
4. Como vecinos separados apenas por un brazo de mar, China y Filipinas han mantenido una estrecha relación, sus pueblos han sido buenos amigos generación tras generación. No existía ninguna disputa entre los dos países sobre la delimitación territorial y marítima hasta los años 1970 cuando Filipinas empezó a invadir y ocupar ilegalmente algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha, creando la cuestión territorial con China en lo referente a estas islas y arrecifes. Además, el desarrollo del derecho internacional marítimo causó también disputas entre los dos Estados sobre la delimitación marítima en algunas aguas del Mar Meridional de China.
5. China y Filipinas no han realizado todavía ninguna negociación designada para resolver sus disputas relevantes en el Mar Meridional de China. Sin embargo, los dos países llevaron a cabo varias rondas de consultas sobre una adecuada gestión de las disputas en el Mar, y llegaron al consenso de resolver estas disputas mediante negociaciones y consultas, lo que ha sido repetidamente reafirmado en una serie de documentos bilaterales. Las dos partes también hicieron un solemne compromiso de solucionar a través de negociaciones y consultas las disputas pertinentes en la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar Meridional de China (a continuación: DOC por sus siglas en inglés) que firmaron juntos China y los países de la ANSEA (Asociación de Naciones del Sudeste Asiático) en 2002.
6. En enero de 2013, yendo en contra de los consensos y el compromiso arriba mencionados, el entonces gobierno de la República de Filipinas planteó unilateralmente el arbitraje del Mar Meridional de China. Filipinas deliberadamente interpretó y selló erróneamente la cuestión territorial que no es contenido de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (a continuación: CONVEMAR) y la disputa de la delimitación marítima que había sido excluida del procedimiento de solución de disputas de la CONVEMAR por la declaración de excepciones opcionales que China hizo en 2006 conforme al artículo 298 de la CONVEMAR. Este acto fue un abuso filipino del mecanismo de solución de disputas de la CONVEMAR. Aprovechando eso, Filipinas intentó negar la soberanía territorial y los derechos e intereses de China en el Mar Meridional de China.
7. El presente documento tiene como propósito clarificar los hechos y decir la verdad sobre las disputas entre China y Filipinas en el Mar Meridional de China, y reafirmar la posición consecuente de China y sus políticas sobre la cuestión del Mar Meridional de China, a fin de indagar el fondo de la cuestión y asegurar una comprensión correcta.
I. Las islas del Mar Meridional de China son territorio inherente de China
i. La soberanía de China en el Mar Meridional de China fue establecida en el curso de la historia
8. El pueblo chino, desde tiempos remotos, ha vivido y realizado actividades productivas en las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes. China fue el primer país en descubrir, nombrar, explorar y explotar las islas del Mar Meridional de China y sus aguas circundantes, y también fue el primero en ejercer una soberanía y jurisdicción continua, pacífica y efectiva en esta área, estableciendo así su soberanía sobre las islas del Mar Meridional de China y sus derechos e intereses relevantes en el Mar.
9. Ya en el siglo II a.n.e., durante la dinastía Han del Oeste, el pueblo chino navegó por el Mar Meridional de China y descubrió las islas en este Mar a lo largo de sus actividades.
10. Un gran número de obras históricas chinas registran las actividades del pueblo chino en el Mar Meridional de China. Entre estos libros figuran Yi Wu Zhi (Anales de Cosas Extrañas) de la dinastía Han del Este (25-220), Fu Nan Zhuan (Anales de Funan) del periodo de los Tres Reinos (220-280), Meng Liang Lu (Registro de un Soñador) y Ling Wai Dai Da (Notas de Lingnan) de la dinastía Song (960-1279), Dao Yi Zhi Lue (Registro de las Islas) de la dinastía Yuan (1271-1368), Dong Xi Yang Kao (Estudios sobre los Océanos Oriental y Occidental) y Shun Feng Xiang Song (Vientos Favoritos para Escolta) de la dinastía Ming (1368-1644), Zhi Nan Zheng Fa (Direcciones de la Brújula) y Hai Guo Wen Jian Lu (Registros de Cosas Vistas y Oídas sobre las Regiones Costeras) de la dinastía Qing (1644-1911). Estos libros describen también las localizaciones geográficas y rasgos geomorfológicos de las islas del Mar Meridional de China y las condiciones hidrográficas y meteorológicas del Mar Meridional de China. En los libros se ven los nombres vívidos que los chinos dieron a las islas del Mar Meridional de China, tales como “Zhanghaiqitou” (atolones retorcidos en la subida de la marea), “Shanhuzhou” (cayo de coral), “Jiuruluozhou” (nueve islotes de cauri), “Shitang” (arrecife rocoso), “Qianlishitang” (arrecife rocoso de mil li), “Wanlishitang” (arrecife rocoso de diez mil li), “Changsha” (cayo de arena largo), “Qianlichangsha” (cayo de arena largo de mil li), y “Wanlichangsha” (cayo de arena largo de diez mil li).
11. Los pescadores chinos establecieron un sistema de denominación relativamente fijo durante el largo proceso de exploración y explotación de las islas del Mar Meridional de China. Ellos denominaban a las islas y los bancos de arena como “zhi”, a los arrecifes como “chan”, “xian” o “sha”, a los atolones como “kuang”, “quan” o “tang”, y a los bajos oceánicos como “shapai”. Geng Lu Bu (Manual de Rutas Marítimas), creado en las dinastías Ming y Qing, es un libro guía de navegación marítima para orientar a los pescadores chinos en sus recorridos entre las zonas costeras de la parte continental de China y las islas del Mar Meridional de China. Sus manuscritos de diversas versiones fueron difundidos y siguen utilizándose hasta ahora. El referido libro registra la vida del pueblo chino en las islas del Mar Meridional de China y las actividades de producción y exploración que ellos hicieron, así como los nombres que dieron a estas islas. Entre estos nombres, más de 70 fueron de las islas, arrecifes, bancos de arena y cayos del archipiélago Nansha. Algunos fueron denominados según las direcciones de la brújula, tales como Chouwei (arrecife Zhubi) y Dongtou Yixin (banco océano Pengbo); algunos según productos acuáticos locales, como Chigua Xian (arrecife Chigua, “chigua” significa “pepino de mar rojo”) y Mogua Xian (arrecife Nanping, “mogua” significa “pepino de mar negro”); algunos según sus formas, como Niaochuan (arrecife Xian’e, “niaochuan” significa “cuerda de pájaros”) y Shuangdan (arrecife Xinyi, “shuangdan” significa “yugo”); algunos según objetos físicos, como Guogai Zhi (banco de arena Anbo, “guogai” significa “tapa de olla”) y Chenggou (isla Jinghong, “chenggou” significa “gancho de romana”); y algunos según vías fluviales, como Liumen Sha (arrecife Liumen, “liumen” significa “seis puertas”).
12. Parte de los nombres que el pueblo chino dio a las islas del Mar Meridional de China fueron citados por los navegadores occidentales y marcados en algunas guías y mapas de navegación autorizados publicados en los siglos XIX y XX. Por ejemplo, Namyit (isla Hongxiu), Sin Cowe (isla Jinghong) y Subi (isla Zhubi) se originaron de “Nanyi”, “Chenggou” y “Chouwei” con su pronunciación en el dialecto de Hainan.
13. Gran número de documentos históricos y reliquias culturales demuestran que el pueblo chino ha realizado una continua exploración y explotación en las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes. Desde las dinastías Ming y Qing, los pescadores chinos viajaron con el viento alisio del noreste al archipiélago Nansha para realizar actividades pesqueras, y volvieron con el viento alisio del suroeste al continente al año siguiente. Algunos de ellos vivían en las islas durante años, en donde pescaban, excavaban pozos para obtener agua potable, cultivaban tierras, construían casas y templos, y criaban aves y otros animales domésticos. Conforme a los documentos históricos y descubrimientos arqueológicos chinos y extranjeros, en algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha se encontraban cultivos, pozos, casas, templos, tumbas e inscripciones lapidarias dejados por pescadores chinos.
14. Muchos documentos foráneos registran también el hecho de que durante un periodo muy largo los chinos eran los únicos que vivían y trabajaban en el archipiélago Nansha.
15. El Directorio del Mar de China, publicado en 1868 por la Junta del Almirantazgo del Reino Unido, al mencionar los arrecifes Zhenghe del archipiélago Nansha, dice: “Los pescadores de Hainan, que se ganaban la vida recogiendo pepinos de mar y caparazones de tortuga, dejaron huellas en todas las islas, y algunos de ellos permanecerían en estas islas durante años”. Además, “Los pescadores que residían en la isla Itu-Aba (isla Taiping) tenían una vida más cómoda que la de los demás. El agua de dicha isla era también mucho mejor que la de otras islas”. El Directorio del Mar de China publicado en 1906 y las ediciones de 1912, 1923 y 1937 del Piloto del Mar de China muestran explícitamente en varias partes las actividades de vida y trabajos cotidianos de los pescadores chinos en el archipiélago Nansha.
16. En la revista francesa Le Monde Colonial Illustré publicada en septiembre de 1933 aparece lo siguiente: Los chinos (nativos de Hainan) eran los únicos que vivían en las nueve islas del archipiélago Nansha, allí no había nadie de otro país. Siete personas vivían en la isla Nanzi (cayo Suroeste), dos de los cuales eran niños; cinco en la isla Zhongye (isla Thitu), cuatro en la isla Nanwei (isla Spratly), con una persona más que en 1930. En la isla Nanyao (isla Loaita) se encontraban sitios de veneración, barracas y pozos dejados por los chinos. En la isla Taiping (isla Itu-Aba), aunque no se observaron habitantes, se descubrieron lápidas con caracteres chinos tallados en los que decían: “Yo, Ti Mung, patrón de junco, he venido aquí durante la luna llena de marzo para traeros alimentos. No he encontrado a nadie. Por ello, dejo el arroz al abrigo de unas rocas y marcho”. En las demás islas también se encontraban por todas partes huellas de los pescadores. Dicha revista registra también que las islas Taiping, Zhongye y Nanwei estaban cubiertas por una vegetación frondosa y contaban con el agua potable. Allí se encontraban árboles de coco, plátano y papayo, piñas, verduras, patatas y animales domésticos, por lo que eran lugares habitables.
17. En la literatura japonesa, Boufuu No Shima (Isla de Tempestad) publicado en 1940 y The Asiatic Pilot (Piloto Asiático), Vol. IV, publicado en 1925 por la Oficina Hidrográfica de los EE.UU., registran también las actividades de producción y vida cotidianas de los pescadores chinos en el archipiélago Nansha.
18. China fue el primer país en efectuar una administración continua sobre las actividades en las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes. En la historia, China ha ejercido una jurisdicción constante, pacífica y efectiva sobre las islas del Mar Meridional de China y sus aguas circundantes mediante el establecimiento de la administración, las patrullas navales, el desarrollo de recursos, la observación astronómica, la investigación geográfica, entre otras medidas.
19. Por ejemplo, durante la dinastía Song, China estableció el puesto de Jing Lue An Fu Shi (enviado imperial para dirección y pacificación) en las regiones de Guangdong y Guangxi, para gobernar el sur de su territorio; en su obra Wu Jing Zong Yao (Esquema de Registro de Asuntos Militares), Zeng Gongliang mencionó que a fin de fortalecer la defensa en el Mar Meridional de China, el país estableció marinas para las patrullas navales. Durante la dinastía Qing, Qiongzhou Fu Zhi (Anales de la Prefectura de Qiongzhou) escrito por Ming Yi y Yazhou Zhi (Anales de Yazhou) escrito por Zhong Yuandi incluyeron “Shitang” y “Changsha” en los ítems de la “defensa marítima”.
20. Muchos registros oficiales locales de China como Guangdong Tong Zhi (Anales Generales de Guangdong), Qiongzhou Fu Zhi (Anales de la Prefectura de Qiongzhou) y Wanzhou Zhi (Anales de Wanzhou), en sus secciones de “territorio” o “geografía, montañas y aguas” recogen que “Wanzhou abarca ‘Qianlichangsha’ y ‘Wanlishitang’” y registros semejantes.
21. Los sucesivos gobiernos chinos han marcado las islas del Mar Meridional de China como territorio chino en los mapas oficiales, incluidos Huang Qing Ge Zhi Sheng Fen Tu (Mapa de las Provincias Directamente Subordinadas a la Autoridad Imperial de Qing) y Tian Xia Zong Yu Tu (Mapamundi General) de 1755, Da Qing Wan Nian Yi Tong Tian Xia Tu (Mapa de la Gran Dinastía Qing de Unificación Entera) de 1767, Da Qing Wan Nian Yi Tong Di Li Quan Tu (Mapa Geográfico de la Gran Dinastía Qing de Unificación Entera) de 1810 y Da Qing Yi Tong Tian Xia Quan Tu (Mapa de la Gran Dinastía Qing Unificada) de 1817.
22. Los hechos históricos muestran que el pueblo chino siempre ha tomado las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes como un lugar para vivir y trabajar y para realizar diversas actividades de exploración y explotación. Los gobiernos chinos de todas las épocas han ejercido también una jurisdicción continua, pacífica y efectiva sobre las islas del Mar Meridional de China. Durante el largo curso de la historia, China ha establecido su soberanía sobre las islas del Mar Meridional de China y sus derechos e intereses relevantes en el Mar Meridional de China. El pueblo chino se ha convertido, desde hace mucho tiempo, en el dueño de las islas del Mar Meridional de China.
ii. China ha defendido siempre y con firmeza su soberanía y sus derechos e intereses marítimos en el Mar Meridional de China
23. La soberanía de China sobre las islas del Mar Meridional de China nunca había tropezado con desafío alguno antes del siglo XX. En las décadas de los 30 y 40 del siglo XX, Francia y Japón invadieron y ocuparon ilegalmente y a la fuerza parte de islas y arrecifes del archipiélago Nansha. El pueblo chino se levantó para combatir resueltamente contra los agresores y el entonces gobierno chino adoptó también una serie de medidas para salvaguardar su soberanía sobre el archipiélago Nansha.
24. En 1933, Francia invadió algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha declarando la “ocupación” de los mismos en un comunicado gubernamental, lo que se conoce como el “Incidente de los Nueve Islotes”. Los diversos lugares y círculos sociales de China reaccionaron enérgicamente y los habitantes se levantaron en protesta contra la invasión de los franceses. Los pescadores chinos que residían en el archipiélago Nansha, igualmente se levantaron en resistencia contra la invasión francesa. Fu Hongguang, Ke Jiayu, Zheng Landing y otros pescadores chinos cortaron las astas con la bandera nacional francesa en las islas Taiping, Beizi, Nanwei, Zhongye y otros islotes.
25. Luego del “Incidente de los Nueve Islotes”, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China manifestó: “Los pescadores chinos son los únicos que viven en las islas del archipiélago Nansha, y éstas han sido reconocidas como territorio chino por la comunidad internacional”. El gobierno chino hizo serias gestiones con el gobierno francés contra su invasión. Al mismo tiempo, y en respuesta al intento de los agresores franceses de engañar a los pescadores chinos para que colgaran la bandera nacional francesa, el gobierno de la provincia de Guangdong ordenó a los jefes de todos sus distritos prohibir la colocación de cualquier bandera extranjera en las embarcaciones chinas que operaban en las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes y distribuir a los pescadores la bandera nacional de China exigiéndoles colgarla en sus barcos.
26. El Comité de Examinación de Mapas Terrestres y Marítimos, compuesto por el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Asuntos Internos, el Ministerio Naval y otras instituciones, revisó y aprobó los nombres de las islas, arrecifes, bancos de arena y cayos de las islas del Mar Meridional de China, y compiló y publicó en 1935 el Mapa de las Islas del Mar Meridional de China.
27. Japón invadió y ocupó ilegalmente las islas del Mar Meridional de China durante su guerra de agresión a China. El pueblo chino resistió heroicamente contra los agresores japoneses. Con el avance de la Guerra Antifascista Mundial y la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Invasión Japonesa, China, los EE.UU. y el Reino Unido demandaron solemnemente en la Declaración de El Cairo, publicada en diciembre de 1943, que Japón tuviera que devolver a China todo territorio que le había robado. En julio de 1945, los tres países publicaron juntos la Declaración de Potsdam, estableciendo con claridad en el artículo 8: “Todas las exigencias en la Declaración de El Cairo serán cumplidas”.
28. En agosto de 1945, Japón anunció su aceptación de la Declaración de Potsdam y su rendición incondicional. De noviembre a diciembre de 1946, el gobierno chino envió en los buques de guerra Yongxing, Zhongjian, Taiping y Zhongye al coronel Lin Zun y otros funcionarios militares y civiles de altos rangos a los archipiélagos Xisha y Nansha para celebrar ceremonias y levantar de nuevo monumentos de la soberanía. Además, envió a tropas a estacionarse en estas zonas. Posteriormente, el gobierno chino denominó cuatro islas de los archipiélagos Xisha y Nansha con los nombres de estos cuatro buques de guerra.
29. En marzo de 1947, el gobierno chino estableció en la isla Taiping la Oficina de Administración del Archipiélago Nansha, institución bajo la jurisdicción de la provincia de Guangdong. En la misma isla construyó también una estación meteorológica y una estación de radio, las cuales emitían información meteorológica desde junio del mismo año.
30. Sobre la base de una nueva cartografía de las islas del Mar Meridional de China, en 1947 el gobierno chino encargó la compilación del Breve Registro de la Geografía de las Islas del Mar Meridional de China, revisó y aprobó la Tabla de Comparación entre los Nuevos y Viejos Nombres de las Islas del Mar Meridional de China, y elaboró el Mapa de Localización de las Islas del Mar Meridional de China con líneas punteadas. En febrero de 1948, el gobierno chino publicó el Mapa de las Regiones Administrativas de la República de China, incluido el Mapa de las Islas del Mar Meridional de China.
31. En junio de 1949, el gobierno chino promulgó el documento de los Reglamentos sobre la Organización de la Oficina del Jefe Ejecutivo de la Región Especial de Hainan, en el cual puso la isla de Hainan, el archipiélago Dongsha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha, el archipiélago Nansha y otras islas subordinadas bajo la jurisdicción de la Región Especial de Hainan.
32. Luego de su fundación en el 1º de octubre de 1949, la República Popular China ha reiterado en múltiples ocasiones y defendido aún más su soberanía sobre las islas del Mar Meridional de China y sus derechos e intereses relevantes en el mismo Mar mediante legislación, establecimiento de administración, gestiones diplomáticas y otras medidas. China nunca ha suspendido el patrullaje y la aplicación de la política, ni la explotación de recursos y la investigación científica en las islas del Mar Meridional de China y sus aguas adyacentes.
33. En agosto de 1951, Zhou Enlai, ministro de Relaciones Exteriores de China, señaló en su Declaración sobre el Borrador del Tratado EE.UU.-Reino Unido de Paz con Japón y sobre la Conferencia de San Francisco: “El archipiélago Xisha y la isla Nanwei (isla Spratly), al igual que el archipiélago Nansha, el archipiélago Zhongsha y el archipiélago Dongsha, han sido siempre territorio chino. Fueron ocupados por el imperialismo japonés durante su guerra de invasión, pero después de la rendición de Japón el entonces gobierno chino las recuperó todas”. “La soberanía inviolable de la República Popular China sobre la isla Nanwei y el archipiélago Xisha, sin importar que el Borrador del Tratado EE.UU.-Reino Unido de Paz con el Japón establezca o no provisiones al respecto y cómo las establece, no será afectada de modo alguno”.
34. En septiembre de 1958, China promulgó la Declaración de la República Popular China sobre el Mar Territorial, estableciendo explícitamente que la anchura del mar territorial del país es de 12 millas y que China adopta el método de líneas de base rectas para determinar las líneas de base de su mar territorial. Estos establecimientos son aplicables para todos los territorios de la República Popular China, que incluyen “el archipiélago Dongsha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha, el archipiélago Nansha y las demás islas pertenecientes a China”.
35. En marzo de 1959, el gobierno chino estableció en la isla Yongxing perteneciente al archipiélago Xisha la “Oficina del Archipiélago Xisha, el Archipiélago Nansha y el Archipiélago Zhongsha”. En marzo de 1969, dicha Oficina cambió el nombre por el “Comité Revolucionario del Archipiélago Xisha, el Archipiélago Nansha y el Archipiélago Zhongsha de la Provincia de Guangdong”. En octubre de 1981, recuperó su nombre original de “Oficina del Archipiélago Xisha, el Archipiélago Nansha y el Archipiélago Zhongsha”.
36. En abril de 1983, el Comité de Toponimia de China fue autorizado para publicar parte de los nombres estandarizados de las islas del Mar Meridional de China, en total 287.
37. En la II Sesión de la VI Asamblea Popular Nacional (APN), que tuvo lugar en mayo de 1984, se decidió fundar la región administrativa de Hainan, bajo cuya jurisdicción se encontraban las islas, islotes y arrecifes del archipiélago Xisha, el archipiélago Nansha, el archipiélago Zhongsha y las aguas adyacentes.
38. En abril de 1988, en la I Sesión de la VII APN se decidió instalar la provincia de Hainan con la jurisdicción sobre las islas, islotes y arrecifes del archipiélago Xisha, el archipiélago Nansha, el archipiélago Zhongsha y las aguas relevantes.
39. En febrero de 1992, China promulgó la Ley de la República Popular China sobre los Mares Territoriales y sus Zonas Contiguas, definiendo el sistema jurídico fundamental relacionado con los mares territoriales y zonas contiguas y estipulando explícitamente: “El territorio terrestre de la República Popular China abarca [...] el archipiélago Dongsha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha, el archipiélago Nansha, así como todas las demás islas pertenecientes a la República Popular China”. La XIX Sesión del Comité Permanente de la VIII Asamblea Popular Nacional, que tuvo lugar en mayo de 1996, aprobó la CONVEMAR, a la vez declaró que “la República Popular China reafirma su soberanía sobre las islas listadas en la cláusula 2 de la Ley de la República Popular China sobre los Mares Territoriales y sus Zonas Contiguas que se promulgó el 25 de febrero de 1992”.
40. En mayo de 1996, el gobierno chino anunció las líneas de base de la parte del mar territorial adyacente al continente, compuestas por líneas rectas que unían los 49 puntos de base adyacentes desde Gaojiao de Shandong hasta Junbijiao de Hainan, así como las líneas de base del mar territorial adyacente al archipiélago Xisha, formadas por líneas rectas que unían los 28 puntos de base adyacentes, y declaró que más adelante establecería el resto de líneas de base del territorio marítimo.
41. En junio de 1998, China promulgó la Ley de la República Popular China sobre las Zonas Económicas Exclusivas y la Plataforma Continental, definiendo el sistema jurídico básico al respecto y estipulando con claridad: “Las provisiones establecidas en la presente Ley no afectarán los derechos históricos de los cuales goza la República Popular China”.
42. En junio de 2012, el Consejo de Estado aprobó la anulación de la Oficina del Archipiélago Xisha, el Archipiélago Nansha y el Archipiélago Zhongsha de la Provincia de Hainan, fundó el municipio de Sansha, de nivel de prefectura, con las islas, islotes y arrecifes del archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha, el archipiélago Nansha y las aguas relevantes bajo su jurisdicción.
43. China concede suma importancia a la protección del medio ecológico y los recursos piscícolas del Mar Meridional de China. Desde 1999, China aplica el régimen de cese de la pesca en la estación estival de dicho Mar. A finales de 2015, China tenía construidas seis reservas naturales de seres vivos acuáticos de nivel nacional y seis de nivel provincial, con una superficie total de 2,69 millones de hectáreas, así como siete áreas de reservas para la protección de recursos de germoplasma de organismos acuáticos de nivel nacional, con una superficie de 1,28 millones de hectáreas.
44. Desde la década de los 50 del siglo XX, las autoridades de Taiwan han mantenido guarniciones en la isla Taiping perteneciente al archipiélago Nansha, en donde establecieron entidades administrativas de servicio civil, realizando explotación y aprovechamiento de recursos naturales de la isla.
iii. La soberanía de China sobre las islas del Mar Meridional de China ha sido ampliamente reconocida en la comunidad internacional
45. Luego de la Segunda Guerra Mundial, China recuperó y reasumió su soberanía sobre las islas del Mar Meridional de China. Muchos países del mundo reconocen sin excepción que las islas del Mar Meridional de China son territorio chino.
46. En 1951, la Conferencia de San Francisco exigió que Japón abandonara todos sus derechos y títulos y reclamaciones de derechos en el archipiélago Nansha y el archipiélago Xisha. En 1952, el gobierno japonés manifestó oficialmente el abandono de todos sus derechos y títulos y reclamaciones de derechos en Taiwan, las islas Penghu, el archipiélago Nansha y el archipiélago Xisha. En el mismo año, el archipiélago Nansha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Dongsha y el archipiélago Zhongsha que Japón abandonó según el Tratado de Paz de San Francisco fueron marcados como territorio chino en el Mapa N.º 15, Sureste Asiático, de Atlas Mundiales Estandarizados recomendado por el entonces ministro de Relaciones Exteriores del Japón Katsuo Okazaki con su firma.
47. En octubre de 1955, la Organización de Aviación Civil Internacional convocó una conferencia en Manila, en la que participaron representantes de EE.UU., Reino Unido, Francia, Japón, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Tailandia, Filipinas, Vietnam del Sur y las autoridades de Taiwan de China. Entre ellos, los representantes de Filipinas y Francia ejercieron como presidente y vicepresidente, respectivamente. La Resolución N.º 24 aprobada en la Conferencia exigió a las autoridades de Taiwan de China intensificar la observación meteorológica en el archipiélago Nansha, y no se registró ninguna oposición o reservación al respecto.
48. El 4 de septiembre de 1958, el gobierno chino promulgó la Declaración del Gobierno de la República Popular China sobre Mares Territoriales, proclamando 12 millas como anchura del mar territorial del país y manifestando de manera clara: “Esta provisión es aplicable para todo el territorio de la República Popular China, incluidos [...] el archipiélago Dongsha, el archipiélago Xisha, el archipiélago Zhongsha, el archipiélago Nansha y todas las demás islas pertenecientes a China”. El 14 del mismo mes, el primer ministro Pham Van Dong del gobierno vietnamita envió una nota diplomática a Zhou Enlai, primer ministro del Consejo de Estado de China, en la que manifestó solemnemente: “El gobierno de la República Democrática de Vietnam reconoce y apoya la Declaración del Gobierno de la República Popular China sobre Mares Territoriales publicada el 4 de septiembre de 1958” y “El gobierno de la República Democrática de Vietnam respeta esta decisión”.
49. En agosto de 1956, el primer secretario Donald E. Webster de la institución de EE.UU. en Taiwan hizo una solicitud verbal a las autoridades de Taiwan de China para autorizar al personal militar de EE.UU. compilar datos geodésicos en la isla Huangyan, los arrecifes Shuangzi, la isla Jinghong, la isla Hongxiu y la isla Nanwei de los archipiélagos Zhongsha y Nansha. Las autoridades de Taiwan de China aprobaron, más tarde, esta solicitud.
50. En diciembre de 1960, el gobierno estadounidense envió una carta a las autoridades de Taiwan de China “solicitando el permiso” para que el personal militar de EE.UU. realizara mediciones in situ sobre los arrecifes Shuangzi, la isla Jinghong y la isla Nanwei pertenecientes al archipiélago Nansha. Las autoridades de Taiwan de China aprobaron, más tarde, esta solicitud.
51. En 1972, Japón reiteró en el Comunicado Conjunto del Gobierno de la República Popular China y el Gobierno del Japón su adherencia al artículo 8 de la Declaración de Potsdam.
52. Según informaciones de la agencia de noticias France Presse, el 4 de febrero de 1974, el entonces ministro indonesio de Relaciones Exteriores Adam Malik Batubara manifestó, “Si miramos los mapas publicados, podemos saber que el archipiélago Paracel (archipiélago Xisha) y la isla Spratly (archipiélago Nansha) pertenecen todos a China”. Como reconocemos la existencia de una sola China, “esto significa que para nosotros estos archipiélagos pertenecen todos a la República Popular China”.
53. Durante la XIV Asamblea de la Comisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO, que tuvo lugar del 17 de marzo al 1 de abril de 1987, los representantes de todos los países discutieron el Plan de Implementación del Sistema Global de Observación del Nivel del Mar 1985-1990 (IOC/INF-663 REV) presentado por la Secretaría de la Comisión. Dicho documento sugirió incluir los archipiélagos Xisha y Nansha en el sistema global de observación del nivel del mar e incluir por escrito los dos en la República Popular China. A fin de aplicar tal plan, el gobierno chino fue encargado de construir cinco estaciones de observación marítima, incluidas una en el archipiélago Nansha y una en el archipiélago Xisha.
54. El hecho de que las islas del Mar Meridional de China pertenecen a China ha alcanzado el consenso entre la comunidad internacional desde hace mucho tiempo. Los anuarios, enciclopedias y mapas publicados por muchos países han marcado el archipiélago Nansha como territorio chino. Entre ellos destacan Worldmark Encyclopedia of the Nations publicada por Worldmark Press de EE.UU. en 1960, New China Yearbook publicado por Far East Book Store del Japón en 1966, Welt-Atlas publicado en 1957, 1958 y 1961 en la República Federal de Alemania, Atlas Zur Erd-Und Länderkunde y Haack Großer Weltatlas publicados en 1958 y 1968 en la República Democrática de Alemania, Atlas Mira publicado de 1954 a 1959 y Administrativno-territorialnoe Delenie Zarubezhnyh Stran publicado en 1957 en la Unión Soviética, la Colección de Mapas en Bolsillo y Világatlasz y Képes Politikai és Gazdasági Világatlasz publicados en Hungría en 1959 y 1974, respectivamente, Malý Atlas Svĕta publicado en 1959 en Checoslovaquia, Atlas Geografic Scolar publicado en 1977 en Rumania, Atlas international Larousse politique et économique y Atlas moderne Larousse publicados por Libraire Larousse de Francia en 1965 y 1969, respectivamente, los mapas en World Encyclopedia de 1972 y 1983 y Grand Atlas World de 1985 publicados por Heibon Sha de Japón, Sekai to Sono Kunikuni publicado por Japan Geographic Data Center de Japón en 1980, etc.
II. Origen de las Disputas Relevantes entre China y Filipinas en el Mar Meridional de China
55. El núcleo de las disputas relevantes entre China y Filipinas en el Mar Meridional de China reside en las cuestiones territoriales derivadas de la invasión y la ocupación ilegal de algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China por Filipinas. Además, con el desarrollo del sistema de derecho internacional marítimo aparecieron también disputas en lo referente a la delimitación marítima entre los dos Estados en relación con ciertas áreas del Mar Meridional de China.
i. Los actos filipinos ilegales de agresión y ocupación dieron origen a las disputas entre China y Filipinas sobre islas y arrecifes de Nansha
56. El territorio de Filipinas está definido por una serie de tratados internacionales, incluidos el Tratado de Paz entre Estados Unidos de América y el Reino de España en 1898 (Tratado de París), el Tratado entre Estados Unidos de América y el Reino de España por la Cesión de las Islas Aledañas de Filipinas en 1900 (Tratado de Washington) y la Convención entre Su Majestad del Reino Unido y el Presidente de los Estados Unidos en Relación con las Fronteras entre el Estado de Borneo Septentrional y el Archipiélago Filipino en 1930.
57. Las islas del Mar Meridional de China se localizan fuera del territorio de Filipinas.
58. En los años 50 del siglo XX, Filipinas intentó algunas acciones sobre el archipiélago Nansha de China que pararían eventualmente debido a la firme oposición de China. En mayo de 1956, el filipino Tomás Cloma organizó una expedición privada a algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha que denominó de manera ilegal como “Tierra de la Libertad”. Más adelante, el vicepresidente y ministro del Exterior de Filipinas Carlos García expresó su apoyo a las actividades de Cloma. En respuesta, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China emitió una severa declaración el 29 de mayo, señalando que el archipiélago Nansha “es siempre parte del territorio de China. La República Popular China tiene soberanía legítima irrefutable sobre estas islas y no tolerará nunca la invasión de estas islas por ningún país y bajo ninguna excusa”. Al mismo tiempo, las autoridades de Taiwan de China enviaron buques de guerra para patrullar el archipiélago Nansha y reinstauraron guarnición en la isla Taiping. Después, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Filipinas declaró que el gobierno filipino no estaba al tanto de las actividades de Cloma previamente y que no le había concedido ningún permiso para que realizara tales acciones.
59. En los años 70 del siglo XX, Filipinas comenzó a invadir y ocupar a la fuerza varias islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China, formulando reclamaciones territoriales ilegales. Filipinas ocupó ilegalmente las islas Mahuan y Feixin en agosto y septiembre de 1970, las islas Nanyao y Zhongye en abril de 1971, las islas Xiyue y Baizi en julio de 1971, el banco de arena Shuanghuang en marzo de 1978 y el arrecife Siling en julio de 1980. En junio de 1978, el presidente de Filipinas Ferdinand Marcos firmó el Decreto Presidencial N.º 1596, en el que algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China y una gran área de sus aguas adyacentes pasaban a denominarse “Conjunto de Islas Kalayaan” (“Libertad” en tagalo es “Kalayaan”), estableció la “Municipalidad de Kalayaan” y los incluyó de forma ilegal en el territorio de Filipinas.
60. Filipinas también ha promulgado una serie de leyes nacionales para establecer sus propias reclamaciones sobre el territorio marítimo, las zonas económicas exclusivas y la plataforma continental, entre las cuales algunas generaron conflictos con los derechos e intereses marítimos de China en el Mar Meridional de China.
61. Filipinas ha inventado múltiples pretextos para justificar la invasión y ocupación ilegales de algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China a fin de alcanzar su ambición territorial, entre otros, el “Conjunto de las Islas Kalayaan” no formaba parte del archipiélago Nansha sino de la terra nullius; el archipiélago Nansha se convirtió en un territorio en fideicomiso después de la Segunda Guerra Mundial; Filipinas ocupó el archipiélago Nansha por su “contigüidad o proximidad” y por las necesidades de su “seguridad nacional”; “parte de las islas y arrecifes del archipiélago Nansha se sitúan en la zona económica exclusiva y plataforma continental de Filipinas”; el “control efectivo” de Filipinas sobre las islas y arrecifes relevantes se ha convertido en un “statu quo” que no se puede cambiar.
ii. La reivindicación ilegal de Filipinas no tiene ningún fundamento histórico o jurisprudencial
62. La reclamación de Filipinas de su soberanía territorial sobre parte de las islas y arrecifes del archipiélago Nansha no tiene fundamento alguno ni por la historia ni por el derecho internacional.
63. Primero, el archipiélago Nansha no ha formado nunca parte del territorio de Filipinas. El ámbito territorial de Filipinas ya ha sido definido por una serie de tratados internacionales. Estados Unidos, país gobernador de Filipinas durante la época que nos concierne, era consciente de estos hechos. El 12 de agosto de 1933, Isabelo de los Reyes, ex senador filipino durante la dominación de Estados Unidos, escribió una carta al virrey Frank Murphy pretendiendo que algunas islas del archipiélago Nansha pasaran a formar parte integrante del archipiélago filipino por su proximidad geográfica. Esa carta fue transmitida al Departamento de la Armada y al Departamento de Estado estadounidenses. El 9 de octubre del mismo año, el secretario de Estado de los Estados Unidos dio respuesta a la carta que “Estas islas [...] se encontraban a una distancia considerable fuera de los límites del archipiélago filipino que España entregó en 1898”. En mayo de 1935, George Dern, secretario del Ejército de Estados Unidos, escribió una carta al secretario de Estado Cordell Hull en la que preguntaba la opinión del Departamento de Estado acerca de la “validez y propiedad” de la reclamación territorial de Filipinas sobre algunas islas del archipiélago Nansha. Un memorando de la Oficina de la Consejería de Historia del Departamento de Estado, firmado por S. W. Boggs, indicaba: “Obviamente, Estados Unidos no tiene ningún fundamento para abogar por que las islas relevantes formen parte del archipiélago filipino”. El 20 de agosto, el secretario de Estado Hull remitió una carta de respuesta al secretario del Ejército Dern en la que afirmaba que “Las islas del archipiélago filipino que Estados Unidos adquirió de España por el Tratado de 1898, son solo aquellas ubicadas dentro de los límites establecidos en el Artículo 3”, y que, refiriéndose a las islas relevantes del archipiélago Nansha, “Se puede observar que [...] no se ha encontrado ninguna mención en que España ejerciera su soberanía o estableciera su reivindicación sobre alguna de estas islas”. Todos estos documentos demuestran que el territorio de Filipinas nunca abarcaba parte alguna de las islas del Mar Meridional de China, hecho reconocido por la comunidad internacional, Estados Unidos en particular.
64. Segundo, la afirmación de que el “Conjunto de las Islas Kalayaan” es la “terra nullius” que ha sido descubierta por Filipinas no tiene fundamento alguno. Filipinas reivindica que fueron ciudadanos filipinos los que “descubrieron” estas islas en 1956, y lo utiliza de excusa para separar algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China a los que denomina “Conjunto de las Islas Kalayaan”. Este es un intento para crear confusión sobre nombres y conceptos geográficos, y desmembrar el archipiélago Nansha de China. De hecho, el ámbito geográfico del archipiélago Nansha es claro y definido, y el llamado “Conjunto de las Islas Kalayaan” es parte del archipiélago Nansha de China. El archipiélago Nansha, desde hace mucho tiempo, es parte inseparable del territorio de China y en ningún caso puede ser considerado “terra nullius”.
65. Tercero, el archipiélago Nansha tampoco es “territorio en fideicomiso”. Según afirma Filipinas, tras la Segunda Guerra Mundial el archipiélago Nansha se hizo “territorio en fideicomiso”, cuya soberanía estaba sin determinar. Esta afirmación de Filipinas no tiene fundamento ni por ley ni por hecho. Los territorios en fideicomiso tras la Guerra fueron todos claramente enumerados en los correspondientes tratados internacionales o documentos del Consejo de Administración Fiduciaria de las Naciones Unidas. El archipiélago Nansha no apareció nunca en esos documentos por lo que no es, en ningún sentido, un territorio en fideicomiso.
66. Cuarto, el derecho internacional no considera ni la “contigüidad o proximidad” ni la “seguridad nacional” fundamentos para la adquisición de territorio. Muchos países tienen territorios lejos de sus áreas territoriales propiamente dichas, y en algunos casos incluso cerca de las costas de otros países. Durante su dominio colonial sobre Filipinas, Estados Unidos tuvo una disputa con Holanda en relación a la soberanía sobre una isla próxima al archipiélago filipino; la reivindicación de Estados Unidos sobre la base de la “contigüidad geográfica” fue juzgada infundada en el derecho internacional. Asimismo, es aún más absurdo el invadir y ocupar territorio de otro país adhiriéndose a la llamada seguridad nacional.
67. Quinto, Filipinas afirma que algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China se localizan dentro de la zona económica exclusiva y de la plataforma continental de Filipinas y por ello pertenecen a Filipinas o pasan a formar parte de su plataforma continental. Esta afirmación pretende utilizar la jurisdicción marítima establecida por la CONVEMAR para denegar la soberanía territorial de China. Esto va en contra del principio del derecho internacional según el cual “la tierra domina el mar”, y totalmente en contra del objetivo y la finalidad de la CONVEMAR, como se estipula en el preámbulo, de “establecer [...] con el respeto a la soberanía de todos los Estados, un orden legal para los mares y océanos”. Por ello, un Estado costero solo puede reclamar jurisdicción marítima bajo la condición previa de respeto a la soberanía de otro Estado, no puede extender su jurisdicción marítima a un área bajo la soberanía de otro Estado ni mucho menos puede usar dicha jurisdicción como excusa para denegar la soberanía de otro Estado o incluso infringir su territorio.
68. Sexto, el llamado control efectivo de Filipinas se estableció sobre la base de una apropiación ilícita y es ilegal e inválido. La comunidad internacional no reconoce el “control efectivo” adquirido mediante la ocupación por la fuerza. El “control efectivo” de Filipinas se trata simple y llanamente de una ocupación por la fuerza de algunas de las islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China. Tal ocupación viola la Carta de las Naciones Unidas y las normas básicas que rigen las relaciones internacionales y está claramente prohibida por el derecho internacional. El “control efectivo” de Filipinas establecido sobre la base de la invasión y ocupación ilícitas no puede cambiar el hecho básico de que el archipiélago Nansha es territorio chino. China se opone con firmeza a cualquier intento de considerar la apropiación de las islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China como “hecho consumado” o “statu quo” y nunca lo reconocerá.
iii. El desarrollo del sistema de derecho internacional marítimo dio lugar a la disputa entre China y Filipinas sobre la delimitación marítima
69. Desde que la CONVEMAR se adoptara y entrara en vigor, las disputas relevantes entre China y Filipinas sobre el Mar Meridional de China se fueron intensificando gradualmente.
70. De acuerdo con las prácticas del pueblo chino y del gobierno de China a lo largo de su historia y la postura adoptada de manera constante por los sucesivos gobiernos de China, y de conformidad con el derecho nacional y bajo el derecho internacional, en los que están la Declaración del Gobierno de la República Popular China sobre Mares Territoriales de 1958, la Ley de la República Popular China sobre Mares Territoriales y Zonas Contiguas de 1992, la Decisión del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional de la República Popular China acerca de la Ratificación de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1996, la Ley de la República Popular China sobre las Zonas Económicas Exclusivas y la Plataforma Continental de 1998, y la CONVEMAR de 1982, China tiene, con base a las islas del Mar Meridional de China, aguas interiores, mar territorial, zona contigua, zona económica exclusiva y plataforma continental. Además, China posee derechos históricos en el Mar Meridional de China.
71. Filipinas proclamó sus aguas interiores, aguas archipelágicas, mar territorial, zona económica exclusiva y plataforma continental de acuerdo con, entre otros, la Ley de la República N.º 387 de 1949, la Ley de la República N.º 3046 de 1961, la Ley de la República N.º 5446 y la Proclamación Presidencial N.º 370 de 1968, el Decreto Presidencial N.º 1599 de 1978 y la Ley de la República N.º 9522 de 2009.
72. En el Mar Meridional de China, China y Filipinas son dos Estados cuya superficie terrestre son costas opuestas, la distancia entre ambas es inferior a las 400 millas náuticas. Las áreas marítimas que reclaman estos dos Estados se solapan, lo que ha dado lugar a la disputa sobre la delimitación marítima.
III. China y Filipinas han alcanzado el consenso sobre la solución de las disputas en el Mar Meridional de China
73. China salvaguarda firmemente su soberanía sobre las islas del Mar Meridional de China, oponiéndose resueltamente a la invasión y la ocupación ilegal de las islas y arrecifes chinos por parte de Filipinas, y rechazando decididamente los actos unilaterales llevados a cabo por Filipinas con el pretexto de realizar sus propias reivindicaciones para infringir los derechos e intereses de China en las aguas bajo la jurisdicción de China. Al mismo tiempo, con el fin de mantener la paz y la estabilidad del Mar Meridional de China, China ha actuado con suma moderación, ha persistido en resolver de forma práctica las disputas con Filipinas en el Mar Meridional de China y ha hecho esfuerzos incansables por ello. China ha realizado consultas con Filipinas sobre la gestión y el control de las diferencias marítimas, la promoción de su cooperación pragmática y otros temas. Ambas partes han llegado a importantes consensos sobre la solución de las disputas relevantes en el Mar Meridional de China por medio de negociaciones y la gestión y el control adecuados de las diferencias correspondientes.
i. Es el consenso y compromiso de China y Filipinas resolver las disputas relevantes en el Mar Meridional de China por medio de negociaciones
74. China se ha dedicado siempre a fomentar las relaciones de amistad con todos los países sobre la base de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica, es decir, el respeto mutuo a la soberanía y la integridad territorial, la no agresión, la no intervención en los asuntos internos de otro, la igualdad y el beneficio recíproco, y la coexistencia pacífica.
75. En junio de 1975, China y Filipinas normalizaron sus relaciones, y en el comunicado conjunto para tal propósito, los dos gobiernos acordaron resolver todas las disputas por medios pacíficos sin recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza.
76. En realidad, la iniciativa de China de “dejar de lado las disputas y buscar el desarrollo conjunto” respecto a la cuestión del Mar Meridional de China fue dirigida primero a Filipinas. En junio de 1986, durante su reunión con el vicepresidente filipino Salvador Laurel, el líder chino Deng Xiaoping indicó que el archipiélago Nansha pertenece a China, y al referirse a las diferencias correspondientes, dijo: “Esta cuestión la podemos dejar de lado por ahora. Varios años después, podemos sentarnos para buscar con calma una solución aceptable para todos. No permitiremos que este problema obstruya nuestras relaciones de amistad con Filipinas y con otros países”. En abril de 1988, en su entrevista con la presidente filipina Corazón Aquino, Deng reiteró que “En lo referente al problema del archipiélago Nansha, China tiene el mayor derecho a la palabra. El archipiélago Nansha es, históricamente, parte del territorio chino, y nadie puso objeciones a esto durante mucho tiempo” y que “partiendo de las relaciones de amistad entre los dos países, podemos dejar de lado la cuestión por ahora y adoptar el medio de desarrollo conjunto”. Más tarde, en cuanto al tratamiento del problema del Mar Meridional de China y el desarrollo de los lazos bilaterales con otros países alrededor de dicho mar, China ha actuado siempre de acuerdo con la idea de Deng Xiaoping: “La soberanía reside en China, pero podemos dejar de lado las disputas y buscar el desarrollo común”.
77. Desde la década de los 80 del siglo XX, China ha planteado una serie de propuestas e iniciativas destinadas a gestionar y solucionar, mediante negociaciones, las disputas con Filipinas en el Mar Meridional de China y ha reiterado en repetidas ocasiones su soberanía sobre el archipiélago Nansha, su posición de solucionar pacíficamente las disputas relevantes y su iniciativa de “dejar de lado las disputas y buscar el desarrollo conjunto”. China ha expresado su clara oposición a la intervención de fuerzas externas y a la internacionalización de la cuestión del Mar Meridional de China, enfatizando que las disputas relevantes no deben afectar las relaciones entre los dos países.
78. En julio de 1992, la XXV Reunión de Ministros del Exterior de la ANSEA, celebrada en Manila, emitió la Declaración Conjunta de la ANSEA sobre el Mar Meridional de China. China expresó su aprecio por los relevantes principios expuestos en dicha Declaración. Ésta aboga siempre por resolver pacíficamente mediante negociaciones la cuestión territorial relativa a parte de islas y arrecifes del archipiélago Nansha y se opone al uso de la fuerza, y está dispuesta a realizar negociaciones con los países concernientes sobre la implementación del principio de “dejar de lado las disputas y buscar el desarrollo conjunto”, cuando las condiciones son propicias.
79. En agosto de 1995, China y Filipinas emitieron la Declaración Conjunta entre la República Popular China y la República de Filipinas respecto a las Consultas sobre el Mar Meridional de China y Otras Áreas de Cooperación, en que ambas acordaban que “las disputas serán resueltas por los países directamente involucrados” y que “se adoptará un proceso gradual y progresivo de cooperación con la intención de negociar finalmente una solución a las disputas bilaterales”. Posteriormente, China y Filipinas construyeron sus consensos en la solución del problema del Mar Meridional de China a través de negociaciones y consultas en una serie de documentos bilaterales, tales como la Declaración Conjunta de la Reunión del Grupo de Expertos de China y Filipinas sobre las Medidas de Construcción de Confianza de marzo de 1999, y la Declaración Conjunta entre el Gobierno de la República Popular China y el Gobierno de la República de Filipinas sobre el Marco de la Cooperación Bilateral en el Siglo XXI del año 2000.
80. En noviembre de 2002, China y diez países miembros de la ANSEA firmaron la DOC con la que los países solemnemente se comprometen a “resolver sus disputas territoriales y jurisdiccionales por medios pacíficos, sin recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza, a través de consultas amistosas y negociaciones entre los Estados soberanos directamente involucrados”, de acuerdo con los principios universalmente reconocidos del derecho internacional, incluida la CONVEMAR, de 1982.
81. Después, China y Filipinas confirmaron sus solemnes compromisos establecidos en la DOC en una serie de documentos bilaterales, entre ellos, el Comunicado de Prensa Conjunto entre el Gobierno de la República Popular China y el Gobierno de la República de Filipinas de septiembre de 2004 y la Declaración Conjunta de la República Popular China y la República de Filipinas en septiembre de 2011.
82. Las disposiciones pertinentes en los mencionados instrumentos bilaterales y la DOC encarnan los siguientes consensos y compromisos entre China y Filipinas en la solución de su problema sobre el Mar Meridional de China: Primero, las disputas serán resueltas por los correspondientes Estados soberanos directamente interesados; segundo, las disputas se cerrarán de manera pacífica a través de negociaciones y consultas con base en la igualdad y el respeto mutuo; tercero, los Estados soberanos directamente involucrados “negociarán al final la solución de las disputas bilaterales” conforme a los principios del derecho internacional por todos reconocidos, incluida la CONVEMAR de 1982.
83. Con la reafirmación en repetidas ocasiones de las negociaciones como medios de solución de las disputas relevantes y el énfasis repetido en que las negociaciones deben ser realizadas por los Estados soberanos directamente implicados, las disposiciones arriba mencionadas han producido obviamente el efecto de excluir cualquier otra manera de solución, incluida la participación de terceras partes. En particular, la Declaración Conjunta de 1995 estipula “negociar al final una solución de las disputas bilaterales”. El término “al final” en este contexto sirve con claridad para enfatizar que las “negociaciones” son la única forma de resolver las disputas por la que las partes deben optar y para excluir otras formas incluido el procedimiento de solución de terceras partes. Dichos consensos y compromisos constituyen un acuerdo entre dos Estados que excluye la participación de una tercera parte en la solución de las disputas, lo que es una manera para resolver las disputas relevantes en el Mar Meridional de China entre China y Filipinas. Este acuerdo debe ser observado.
ii. Es el consenso y compromiso de China y Filipinas gestionar y controlar de manera adecuada las disputas relevantes en el Mar Meridional de China
84. China aboga permanentemente por crear una buena atmósfera para la solución final de las disputas relevantes en el Mar Meridional de China debiendo las partes pertinentes gestionar y controlar las disputas a través de la elaboración de reglas, el perfeccionamiento de mecanismos, la cooperación pragmática, el desarrollo conjunto y otras formas.
85. Desde los años 1990, China y Filipinas han llegado a una serie de consensos sobre la gestión y control de sus disputas: Primero, ejercer la moderación en el problema concerniente a las disputas relevantes y abstenerse de tomar acciones que puedan conducir a un agravamiento del estado de las cosas; segundo, mantener su compromiso de gestionar y controlar las disputas mediante los mecanismos de consultas bilaterales; tercero, persistir en impulsar la cooperación marítima pragmática y el desarrollo conjunto; y cuarto, hacer que las disputas relevantes no afecten al desarrollo sano de las relaciones bilaterales y la paz y la estabilidad en la región del Mar Meridional de China.
86. En la DOC, China y Filipinas también alcanzaron los siguientes consensos: mantener la auto-moderación, no tomar acciones que puedan complicar o intensificar las disputas y afectar la paz y la estabilidad; antes de la solución pacífica de las disputas territoriales y jurisdiccionales, en el espíritu de cooperación y entendimiento, esforzarse por buscar diversas vías dirigidas a establecer confianza mutua; y explorar o desplegar actividades de cooperación en la protección del ambiente marítimo, los estudios oceanológicos, la seguridad de navegación y comunicación en el mar, la operación de búsqueda y rescate, la lucha contra la delincuencia transnacional y en otros aspectos.
87. China y Filipinas han logrado algunos avances en la gestión y el control de sus diferencias y la realización de la cooperación marítima pragmática.
88. En marzo de 1999, China y Filipinas celebraron la Primera Reunión del Grupo de Expertos en las Medidas de Construcción de Confianza en el Mar Meridional de China y las dos partes emitieron un Comunicado Conjunto del Grupo de Trabajo de Medidas de Construcción de Confianza China-Filipinas indicando que “ambas partes se comprometen a dar solución a las disputas mediante consultas pacíficas basándose en los principios del derecho internacional ampliamente aceptados incluida la CONVEMAR [...] ambas partes acuerdan mantener auto-moderación y abstenerse de adoptar acciones que puedan agravar la situación”.
89. La Declaración de Prensa Conjunta de la Tercera Reunión del Grupo de Expertos en las Medidas de Construcción de Confianza, publicada por China y Filipinas en abril de 2001, señaló que “las dos partes han llegado a entender que el mecanismo de consultas bilateral para explorar formas de cooperación en el Mar Meridional de China, establecido por los dos países, es rico en efectos. Una serie de entendimientos y consensos alcanzados por las dos partes han desempeñado un papel constructivo en el mantenimiento del desarrollo sano de las relaciones chino-filipinas y de la paz y la estabilidad de la región del Mar Meridional de China”.
90. En septiembre de 2004, en presencia de los líderes de China y Filipinas, la China National Offshore Oil Corporation (CNOOC) y la Philippine National Oil Company (PNOC) firmaron el Acuerdo sobre la Realización de Trabajos Sísmicos Conjuntos en Parte de Aguas del Mar Meridional de China. En marzo de 2005, las compañías petroleras nacionales de China, Filipinas y Vietnam firmaron, con la conformidad tanto de China como de Filipinas, el Acuerdo Tripartito sobre la Realización de Trabajos Sísmicos Conjuntos en el Área Acordada en el Mar Meridional de China, definiendo luego de consultas que en el período acordado de tres años, estas compañías petroleras concluyeran los trabajos de recoger y procesar determinada cantidad de líneas de medición sísmica 2D y 3D en el área pactada que cubre unos 143.000 km², reprocesar cierta cantidad de líneas de medición sísmica 2D existentes y estudiar y evaluar el estado de recursos petroleros en el área acordada. La Declaración Conjunta entre la República Popular China y la República de Filipinas de 2007 manifestó que “ambas partes consideran que los trabajos sísmicos conjuntos tripartitos en el Mar Meridional de China sirven como un ejemplo para la cooperación en la región y aprueban que se puede explorar cómo elevar a niveles más altos la cooperación entre las tres partes para fortalecer la buena tendencia del establecimiento de la confianza recíproca en la región”.
91. Lamentablemente, debido a la falta de deseos de cooperación de Filipinas, la Reunión del Grupo de Trabajo en las Medidas de Construcción de Confianza China-Filipinas quedó estancada, y las investigaciones sísmicas tripartitas China-Filipinas-Vietnam en el mar no pudieron continuar.
IV. Filipinas ha tomado una y otra vez acciones conducentes a complicar las disputas
92. Desde la década de los 80 del siglo XX, Filipinas ha tomado una y otra vez acciones conducentes a complicar las disputas.
i. Filipinas intenta ampliar su ocupación de parte de islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China
93. En la década de los 80 del siglo XX Filipinas comenzó a construir instalaciones militares en las correspondientes islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China que había invadido y ocupado ilegalmente. En la década de los 90, Filipinas continuó construyendo aeropuertos y bases de las fuerzas navales y aéreas en esas islas y arrecifes ocupados ilegalmente; teniendo como prioridad la isla Zhongye del archipiélago Nansha de China ilegalmente ocupada, continuó construyendo y renovando en las correspondientes islas y arrecifes aeropuertos, cuarteles militares, muelles y demás instalaciones, para facilitar el despegue y aterrizaje de aviones de transporte pesados, aviones de combate y la capacidad de más y mayores buques. Asimismo, Filipinas hizo deliberadas provocaciones, enviando frecuentemente buques y aviones militares a invadir los arrecifes Wufang, Xian’e, Xinyi, Banyue y Ren’ai del archipiélago Nansha de China destruyendo marcadores topográficos colocados por China.
94. Para agravar la situación, el 9 de mayo de 1999 Filipinas envió BRP Sierra Madre (LT-57), un buque de guerra, a invadir la isla Ren’ai de China encallándolo con el pretexto de “dificultades técnicas”. China inmediatamente hizo gestiones ante Filipinas, demandándole que remolcara la embarcación sin más demora. No obstante, ese país lo rehusó diciendo no contar con métodos como remolcar dicho buque “por falta de componentes y piezas”.
95. Sobre este asunto, China hizo repetidas gestiones ante Filipinas insistiendo en que Filipinas remolcara dicho buque. Por ejemplo, en noviembre de 1999, el embajador chino en Filipinas citó a Domingo Siazon, ministro de Asuntos Exteriores y a Leonora de Jesus, directora de la Oficina del Presidente, de Filipinas, para hacer otra ronda de gestiones acerca del “encallamiento” ilegal de dicho buque en el arrecife Ren’ai de China. Filipinas hizo compromisos repetidos de retirar del arrecife Ren’ai el buque pero nunca los llevó en práctica.
96. En septiembre de 2003, al enterarse de que Filipinas se estaba preparando para construir instalaciones alrededor del buque de guerra ilegalmente “encallado” en el arrecife chino Ren’ai, China hizo de inmediato gestiones. El ministro interino de Asuntos Exteriores de Filipinas, Franklin Ebdalin, respondió que su país no tenía intención alguna de construir instalaciones en el arrecife chino Ren’ai, y que como signatario de la DOC, Filipinas no tenía ningún deseo ni sería el primero en violar la DOC.
97. Sin embargo, Filipinas no cumplió su compromiso de retirar el buque, sino que recurrió a peores provocaciones. En febrero de 2013, Filipinas colocó alrededor del buque “encallado” cables fijos, el personal a bordo actuó con mucha frecuencia, preparándose para colocar instalaciones permanentes. En respuesta a las repetidas gestiones de China, el ministro filipino de Defensa Nacional Voltaire Gazmin manifestó que su país estaba simplemente abasteciendo y reparando el buque y que se comprometió a no construir instalaciones en el arrecife Ren’ai.
98. El 14 de marzo de 2014, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Filipinas emitió una declaración, afirmando abiertamente que antaño Filipinas “encalló” BRP Sierra Madre (LT-57)
en el arrecife Ren’ai precisamente con fines de tomar dicho buque de guerra como una instalación permanente del gobierno filipino en el arrecife Ren’ai, intentando tenerlo como pretexto para continuar negándose a cumplir el compromiso de remolcar dicho buque de guerra y luego llegar al objetivo de ocupar el arrecife Ren’ai.
99. En julio de 2015, Filipinas declaró públicamente que estaba realizando el mantenimiento y la consolidación internos de dicho buque de guerra.
100. En resumen, encallando su buque de guerra en el arrecife Ren’ai, y luego prometiendo remolcarlo pero rompiendo su promesa hasta fortificarlo, Filipinas ha demostrado ser el primero en violar deliberadamente la DOC.
101. Durante largo tiempo, Filipinas ha invadido y ocupado ilegalmente islas y arrecifes correspondientes del archipiélago Nansha de China y construido allí diversos tipos de instalaciones militares con el intento de crear un hecho consumado de la ocupación permanente. Con estos actos Filipinas ha infringido gravemente la soberanía de China sobre las islas y arrecifes revelantes del archipiélago Nansha y ha violado gravemente la Carta de las Naciones Unidas y las normas fundamentales del derecho internacional.
ii. Filipinas ha intensificado una y otra vez su infracción de los derechos e intereses marítimos de China
102. A partir de la década de los 70 del siglo XX, Filipinas, haciendo valer sus reclamaciones unilaterales, ha invadido, entre otras, los bancos Liyue y Zhongxiao del archipiélago Nansha de China para llevar a cabo la perforación exploratoria de petróleo y gas, incluida la lista de los bloques relevantes para la licitación.
103. Desde la entrada en el siglo XXI, Filipinas ha expandido las áreas para la licitación, invadiendo grandes superficies marítimas del archipiélago Nansha de China. En 2003, Filipinas designó una gran área de las aguas del archipiélago Nansha de China como bloques de licitación. En mayo de 2014, Filipinas hizo su quinta ronda de licitación por petróleo y gas, en la cual cuatro bloques para la licitación penetraron en las aguas relevantes del archipiélago Nansha de China.
104. Filipinas ha invadido sin cesar las aguas relevantes del archipiélago Nansha de China, persiguiendo y atacando a pescadores y barcos de pesca chinos que estaban realizando operaciones rutinarias. Según estadísticas incompletas, entre 1989 y 2015, ocurrieron 97 incidentes en que Filipinas atentaba contra la seguridad, la vida y la propiedad de pescadores chinos: en 8 ocasiones se produjeron tiroteos, hubo 34 asaltos y robos, se realizaron 40 capturas y detenciones y 15 persecuciones. Estos incidentes atañeron a cerca de 200 barcos de pesca y más de 1.000 pescadores chinos. Es más, Filipinas los trató de manera bárbara, violenta, cruel e inhumana.
105. El personal armado filipino a menudo abusa de su fuerza con pescadores chinos haciendo caso omiso de la seguridad de la vida de estos. Por ejemplo, el 27 de abril de 2006, un buque de pesca armado de Filipinas invadió las aguas marítimas de Nanfang Qiantan del archipiélago Nansha de China y atacó por sorpresa al barco chino de pesca Qiongqionghai 03012. Una lancha armada motorizada de Filipinas y cuatro hombres armados se acercaron al barco de pesca chino. Inmediatamente estos militares dispararon tiros continuos sobre el panel de mando, asesinando a Chen Yichao y otros tres pescadores chinos en el lugar, hiriendo gravemente a otros dos y ligeramente a uno. Después 13 personas armadas subieron por la fuerza al barco de pesca chino y se apoderaron de los equipos de navegación y comunicación por satélite, herramientas de pesca, pescados, etc.
106. Filipinas ha infringido repetidamente los derechos e intereses marítimos de China con intención de expandir y afianzar sus reivindicaciones ilegales en el Mar Meridional de China. Con estas acciones Filipinas ha violado gravemente la soberanía y los derechos e intereses de China en dicho Mar. Con los actos de violación de los derechos e intereses marítimos de China, Filipinas ha contrariado gravemente su propio compromiso hecho en la DOC en el sentido del mantenimiento de la auto-moderación, la abstención de tomar acciones conducentes a complicar o intensificar las disputas. Disparando a barcos de pesca y pescadores chinos, capturando a pescadores chinos por la fuerza, aplicándoles tratos inhumanos y robando sus propiedades, Filipinas ha infringido gravemente la seguridad personal y de propiedad y la dignidad de los pescadores chinos, lo que constituye una flagrante violación de los derechos humanos básicos.
iii. Filipinas tiene también pretensiones territoriales sobre la isla Huangyan de China
107. Filipinas tiene también pretensiones territoriales sobre la isla Huangyan de China e intenta ocupar dicha isla ilegalmente.
108. La isla Huangyan es territorio inherente de China, sobre la cual China ejerce continua, pacífica y efectivamente la soberanía y jurisdicción.
109. Antes de 1997, Filipinas nunca había desafiado la soberanía de China sobre la isla Huangyan, ni tampoco había formulado ninguna reivindicación territorial sobre esa isla. El 5 de febrero de 1990, el embajador filipino en Alemania, Bienvenido A. Tan, Jr., afirmó en una carta al radioaficionado alemán Dieter Löffler que “De acuerdo con la Agencia Nacional de Información de Cartografía y Recursos de Filipinas, el Arrecife Scarborough o isla Huangyan no está dentro de la soberanía territorial de Filipinas”.
110. Una “Certificación sobre los Límites Territoriales de la República de Filipinas” emitida por la Agencia Nacional de Información de Cartografía y Recursos de Filipinas, el 28 de octubre de 1994, indicó que “los límites territoriales y la soberanía de la República de Filipinas son establecidos en el Artículo 3 del Tratado de París, firmado el 10 de diciembre de 1898”, y confirmó que los “límites territoriales que se muestran en el Mapa Oficial N.º 25 publicado por el Ministerio de Medioambiente y Recursos Naturales, a través de la Agencia Nacional de Información de Cartografía y Recursos de Filipinas, son totalmente correctos y demuestran el estatus actual”. Como se describe anteriormente, el Tratado de París y otros dos tratados definen los límites territoriales de Filipinas, y la isla Huangyan de China se encuentra claramente fuera de esos límites. El Mapa Oficial N.º 25 de Filipinas refleja este hecho. En una carta fechada el 18 de noviembre de 1994 a la American Radio Relay League, Inc., la Asociación de Radioaficionados de Filipinas escribió que “una importante realidad reside en que la agencia nacional concerniente gubernamental (de Filipinas) había declarado que con base en el Artículo 3 del Tratado de París firmado el 10 de diciembre de 1898, el arrecife Scarborough se ubica justamente fuera de los límites territoriales de Filipinas”.
111. En abril de 1997, Filipinas dio la espalda a su posición anterior de que la isla Huangyan no formaba parte del territorio filipino. Filipinas siguió, monitoreó y perturbó a una expedición internacional de radio en la isla Huangyan, organizada por la Asociación de Radio Deportiva de China. Incluso haciendo caso omiso de los hechos históricos, Filipinas puso su reivindicación territorial sobre la isla Huangyan aludiendo que esta isla se encuentra localizada dentro de la zona económica exclusiva de 200 millas náuticas por las que aboga Filipinas. A este respecto, China hizo múltiples gestiones ante Filipinas, puntualizando explícitamente que la isla Huangyan es territorio inherente de China y que la reivindicación de Filipinas es infundada, ilegal e inválida.
112. El 17 de febrero de 2009, el Congreso de Filipinas aprobó la Ley de la República N.º 9522. Esta incluye ilegalmente en el territorio filipino a la isla Huangyan y parte de islas y arrecifes del archipiélago Nansha de China. China hizo de inmediato gestiones ante Filipinas y emitió declaraciones, reiterando la soberanía china sobre la isla Huangyan, el archipiélago Nansha y sus aguas adyacentes, y cualquier reivindicación territorial y soberana sobre la isla Huangyan, el archipiélago Nansha y sus aguas adyacentes por parte de cualquier otro país es ilegal e inválida.
113. El 10 de abril de 2012, el buque de guerra de la marina filipina BRP Gregorio del Pilar (PF-15) invadió aguas adyacentes de la isla Huangyan de China, capturando ilegalmente a pescadores chinos y reteniendo sus barcos de pesca en operación y tratándoles de una manera gravemente inhumana, por lo que provocó el Incidente de la Isla Huangyan. En respuesta a la provocación filipina, China hizo de inmediato múltiples gestiones fuertes en Beijing y Manila exteriorizando enérgicas protestas contra la violación filipina de la soberanía territorial de China y contra la persecución filipina a pescadores chinos, y exigió que Filipinas retirara enseguida todas sus embarcaciones y personas. Mientras tanto, el gobierno chino envió con rapidez buques de vigilancia marítima, buques ejecutores de ley de la administración de la pesca a la isla Huangyan para salvaguardar la soberanía y rescatar a los pescadores chinos. En junio de 2012, después de firmes gestiones hechas por China en múltiples ocasiones, Filipinas retiró de la isla Huangyan sus embarcaciones y personal relevantes.
114. La reclamación de Filipinas sobre la isla Huangyan de China carece de fundamento en virtud del derecho internacional. La reclamación ilegal de que “la isla Huangyan se encuentra en la zona económica exclusiva de 200 millas náuticas de Filipinas, por lo que es territorio filipino” es una distorsión deliberada y absurda del derecho internacional. El hecho de que Filipinas enviara su buque de guerra a penetrar con armas en aguas adyacentes de la isla Huangyan violó seriamente la soberanía territorial de China, la Carta de las Naciones Unidas y los principios básicos del derecho internacional. Al instigar la intrusión a gran escala de sus barcos y personas en aguas de la isla Huangyan, Filipinas violó gravemente la soberanía de China y sus derechos soberanos sobre las aguas de la isla Huangyan. Con la detención ilegal de pescadores chinos dedicados a operaciones normales en aguas de la isla Huangyan y el posterior trato inhumano de gravedad a que sometió a esos pescadores, Filipinas atentó seriamente contra la dignidad personal de los pescadores y pisoteó los derechos humanos.
iv. El inicio unilateral de arbitraje de Filipinas es un acto de mala fe
115. El 22 de enero de 2013, el entonces gobierno de la República de Filipinas inició el arbitraje del Mar Meridional de China, al dar la espalda al consenso alcanzado y reafirmado de manera repetida por China y Filipinas para resolver mediante negociaciones las disputas relevantes en el Mar Meridional de China, violando sus solemnes compromisos expresados en la DOC. Convirtiendo deliberadamente las disputas relevantes en meras cuestiones relativas a la interpretación y la aplicabilidad de la CONVEMAR y siendo plenamente consciente de que las disputas territoriales no están sujetas a esta Convención y que las disputas por la delimitación marítima fueron excluidas por la correspondiente declaración de China en 2006 de los mecanismos de solución de diferencias obligatorias de la CONVEMAR, Filipinas ha abusado deliberadamente de estos mecanismos e iniciado de modo unilateral el caso de arbitraje relativo al Mar Meridional de China. Su objetivo al iniciar el arbitraje no radica en solucionar las disputas con China, sino en negar la soberanía territorial y los derechos e intereses de China en el Mar Meridional de China. El acto filipino es de mala fe.
116. Primero, iniciando unilateralmente el arbitraje, Filipinas ha violado su acuerdo permanente con China para resolver las disputas relevantes mediante negociaciones bilaterales. En los documentos bilaterales pertinentes, China y Filipinas han acordado solucionar sus disputas en el Mar Meridional de China mediante negociaciones y reafirmado este acuerdo en varias ocasiones. China y Filipinas hicieron solemnes compromisos al respecto en la DOC, posición repetidamente confirmada en los documentos bilaterales. Los mencionados documentos firmados entre China y Filipinas y las disposiciones correspondientes en la DOC se complementan mutuamente y constituyen un convenio en este sentido entre las dos partes. Conforme al convenio, ambas partes, China y Filipinas han optado por resolver las disputas relevantes mediante negociaciones y excluir cualquier solución de una tercera parte, incluido el arbitraje Pacta sunt servanda. Esta norma fundamental del derecho internacional ha de ponerse en práctica. El incumplimiento de Filipinas de su solemne compromiso es un acto deliberado y de mala fe. Tal acto no genera ningún derecho para Filipinas, ni impone ninguna obligación a China.
117. Segundo, el inicio unilateral del arbitraje por parte de Filipinas ha violado el derecho de China a seleccionar por su cuenta formas de solución de disputas como Estado parte de la CONVEMAR. El Artículo 280 en la Parte XV de la CONVEMAR estipula: “Ninguna de las disposiciones de esta Parte afectará el derecho de los Estados Parte a acordar, en cualquier momento, solucionar sus controversias relativas a la interpretación o la aplicación de esta Convención por cualquier medio pacífico de su elección”; el Artículo 281 de la CONVEMAR establece: “Si los Estados Parte que sean sujetos en una controversia relativa a la interpretación o la aplicación de esta Convención han convenido en tratar de resolver por un medio pacífico de su elección, los procedimientos establecidos en esta Parte se aplicarán sólo cuando no se haya llegado a una solución por ese medio y el acuerdo entre las partes no excluya la posibilidad de aplicar otro procedimiento”. Debido a que China y Filipinas han adoptado una opción inequívoca de solucionar las disputas relevantes por medio de negociaciones, los procedimientos obligatorios de solución de controversias de una tercera parte en virtud de la CONVEMAR no son aplicables.
118. Tercero, con el inicio unilateral del arbitraje, Filipinas ha abusado de los procedimientos de solución de controversias establecidos en la CONVEMAR. La esencia del asunto en cuestión del arbitraje iniciado por Filipinas es una cuestión de soberanía territorial sobre algunas islas y arrecifes en el Mar Meridional de China, y la resolución de los asuntos relevantes constituye también una parte inseparable de la delimitación marítima entre China y Filipinas. Las cuestiones del territorio terrestre no están reguladas por la CONVEMAR. En 2006, conforme al Artículo 298 de esta Convención, China dio a conocer una declaración de excepciones opcionales excluyendo de los procedimientos obligatorios de solución de controversias establecidos en la CONVEMAR las disputas relativas, entre otras, la delimitación marítima, bahías históricas o títulos, y actividades militares y de aplicación de la ley. Dicha declaración hecha por más de 30 Estados, incluida China, forma parte integrante del mecanismo de solución de controversias de la CONVEMAR. Camuflando sus demandas, Filipinas eludió deliberadamente la declaración de excepciones opcionales hecha por China y la limitación de que las disputas por el territorio terrestre no están sujetas a la CONVEMAR, e inició unilateralmente el arbitraje. Con este curso de conducta Filipinas abusó de los procedimientos de solución de controversias de esta Convención.
119. Cuarto, con el fin de impulsar el procedimiento de arbitraje, Filipinas distorsionó la realidad, malinterpretó las leyes e inventó una serie de infundios.
--Filipinas, al conocer muy bien que sus demandas afectan a la soberanía territorial de China en el Mar Meridional de China y que la cuestión territorial no está sujeta a la CONVEMAR, deliberadamente tergiversa y cubre las cuestiones relevantes como aquellas relativas a la interpretación o aplicación de esta Convención;
--Filipinas, al conocer muy bien que sus demandas afectan a la delimitación marítima, y que China ha hecho una declaración de acuerdo con el artículo 298 de la CONVEMAR, excluyendo las disputas relativas, entre otras, a la delimitación marítima de los procedimientos de solución de controversias de la tercera parte de dicha Convención, intencionalmente desprende los diversos factores que necesitan ser considerados en el proceso de dicha delimitación y los trata en forma aislada, con el propósito de eludir la declaración de excepciones opcionales de China;
--Filipinas malinterpreta deliberadamente ciertas consultas con China sobre los asuntos marítimos y su cooperación, todos de naturaleza general, como las negociaciones para el procedimiento en materia de arbitraje, y afirma después que las negociaciones bilaterales, por lo tanto, se han agotado, a pesar del hecho de que ambas partes nunca han llevado a cabo negociación alguna sobre esos procedimientos;
--Filipinas declara que no busca una determinación de cualquier problema territorial o una delimitación de la frontera marítima, pero en repetidas ocasiones en el curso del procedimiento de arbitraje, especialmente durante las audiencias orales, niega la soberanía territorial de China y sus derechos e intereses en el Mar Meridional de China;
--Filipinas hace caso omiso de la posición y práctica consistentes de China en el Mar Meridional de China, y hace una afirmación completamente falsa de que China establece una exclusividad de derechos e intereses marítimos sobre todo el Mar Meridional de China;
--Filipinas exagera intencionadamente el papel de los colonialistas occidentales en el Mar Meridional de China en la historia y niega los hechos históricos y efectos legales correspondientes a la exploración, explotación y administración de China en aguas relevantes del Mar Meridional de China durante largo tiempo;
--Filipinas compila escasas evidencias y remotamente relevantes de las que saca conclusiones exageradas para apoyar sus alegatos;
--Filipinas, a fin de hacer sus reclamaciones, interpreta a su antojo las reglas del derecho internacional, y recurre a grandes cantidades de casos legales muy controvertidos y opiniones personales sin autoridad.
120. En conclusión, el inicio unilateral filipino del arbitraje viola el derecho internacional, incluido el mecanismo de solución de disputas de la CONVEMAR. Los laudos dictados por el Tribunal de Arbitraje en el arbitraje del Mar Meridional de China establecido a petición unilateral de Filipinas son nulos y sin efecto, no tienen fuerza vinculante y no tienen ningún efecto sobre la soberanía de China en las islas del Mar Meridional de China y sus derechos e intereses en dicho Mar. China no acepta ni reconoce la sentencia. China rechazará y no aceptará jamás ninguna reclamación o acción basadas en estos laudos.
V. La política de China para con la cuestión del Mar Meridional de China
121. China es una importante fuerza para mantener la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China. Se atiene siempre a los objetivos y los principios de la Carta de las Naciones Unidas y se compromete a salvaguardar y promover el imperio de la ley en el derecho internacional. Respeta y actúa de acuerdo con el derecho internacional. Mientras salvaguarda firmemente su soberanía territorial y derechos e intereses marítimos en el Mar Meridional de China, se adhiere a la posición de resolver disputas a través de negociaciones y consultas y a la gestión y control de diferencias mediante reglas y mecanismos. China se esfuerza por lograr resultados de ganar-ganar por medio de cooperaciones de beneficio mutuo, se compromete a hacer del Mar Meridional de China un mar de paz, cooperación y amistad.
122. China persiste en mantener la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China junto con otros países en la región y defender la libertad de navegación y sobrevuelo en el Mar Meridional de China disfrutada por los países según el derecho internacional. China urge a los países fuera de esta región para que respeten los esfuerzos en esta materia dedicados por los países de la región y desempeñen un papel constructivo en el mantenimiento de la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China.
i. Acerca del asunto territorial del archipiélago Nansha
123. China salvaguarda firmemente su soberanía sobre el Mar Meridional de China y sus aguas circundantes. Ciertos países han hecho ilegalmente reivindicaciones territoriales y ocupado por la fuerza algunas islas y arrecifes del archipiélago Nansha. Estas reclamaciones y ocupaciones ilegales violan gravemente la Carta de las Naciones Unidas y las normas fundamentales que rigen las relaciones internacionales. Son nulas y sin efecto. China se opone consistente y resueltamente a dichas acciones y demanda que los Estados relevantes suspendan su invasión contra el territorio chino.
124. China se ha dedicado a resolver, sobre la base del respeto de los hechos históricos, las disputas pertinentes con Filipinas y otros países directamente implicados, a través de negociaciones en concordancia con el derecho internacional.
125. Es sabido por todos que la cuestión del territorio terrestre no pertenece a la regulación de la CONVEMAR. Por consiguiente, la cuestión territorial del archipiélago Nansha no está sujeta a esta Convención.
ii. Acerca de la delimitación marítima en el Mar Meridional de China
126. China sostiene que el problema de delimitación marítima en el Mar Meridional de China sea solucionado equitativamente mediante negociaciones con los países directamente involucrados de acuerdo con el derecho internacional, incluida la CONVEMAR. Hasta que se alcance una solución definitiva, todas las partes relevantes deben ejercer la auto-moderación y no adoptar acciones que puedan complicar o agravar las disputas y afectar a la paz y la estabilidad.
127. Al ratificar la CONVEMAR en 1996, China declaró que “La República Popular China efectuará, mediante consultas, la demarcación del límite de jurisdicción marítima con los Estados con costas opuestas o adyacentes a China, respectivamente, sobre la base del derecho internacional y en concordancia con los principios de equidad”. La Ley de la República Popular China sobre la Zona Económica Exclusiva y la Plataforma Continental de 1998 dejó con mayor claridad la posición de principio de China para dar solución al problema de la demarcación de fronteras marítimas con los países contiguos en el mar, o sea, “La República Popular China determinará la delimitación de su zona económica exclusiva y plataforma continental con respecto a las reclamaciones superpuestas junto con los Estados con costas opuestas o adyacentes, conforme al principio de equidad y sobre la base del derecho internacional”, y “Las disposiciones de esta ley no afectarán los derechos históricos de los que la República Popular China ha gozado desde los días del pasado”.
128. China no acepta ninguna acción unilateral que intente hacer reclamaciones marítimas contra China. Ésta tampoco reconoce ninguna acción que pueda perjudicar sus derechos e intereses marítimos en el Mar Meridional de China.
iii. Acerca de las formas y métodos de solución de disputas
129. Fundamentándose en un profundo entendimiento de las prácticas internacionales y su propia y rica práctica, China confía firmemente en que no importa qué mecanismo o medios se elijan para resolver disputas entre los países, el consentimiento de los Estados concernientes será la base de esta elección, y la voluntad de los Estados soberanos no debe ser violada.
130. Sobre los problemas relativos a la delimitación territorial y marítima, China no acepta ningún plan de solución impuesta, ni recurso unilateral a soluciones de una tercera parte. El 25 de agosto de 2006, China sometió, en conformidad con el Artículo 298 de la CONVEMAR, al secretario general de la ONU una declaración, indicando que “El Gobierno de la República Popular China no acepta ninguno de los procedimientos previstos en la Sección 2 en la Parte XV de la Convención con respecto a todas las categorías de disputas a que se refieren el párrafo 1 (a), (b) y (c) del Artículo 298 de la Convención”. Esto excluye explícitamente de los procedimientos obligatorios de solución de controversias de la CONVEMAR las disputas relativas a la delimitación marítima, bahías históricas o títulos, actividades militares y de aplicación de la ley, y disputas respecto de las cuales el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ejerce las funciones que le asigne la Carta.
131. Desde su fundación, la República Popular China ha firmado tratados fronterizos con 12 de sus 14 vecinos terrestres a través de negociaciones y consultas bilaterales a la luz del espíritu de equidad y comprensión mutua, y cerca del 90% de las fronteras terrestres de China han sido delimitadas y demarcadas. China y Vietnam han delimitado mediante negociaciones los límites entre sus mares territoriales, zonas económicas exclusivas y plataformas continentales en la Bahía Beibu. La sinceridad de China en cuanto a la solución de disputas por medio de negociaciones y sus esfuerzos incesantes hechos a este respecto son conocidos por todos. Es evidente que las negociaciones reflejan directamente la voluntad de los Estados. Las partes participan directamente en la formulación de los resultados. Las prácticas demuestran que un resultado negociado ganará mejor el entendimiento y apoyo de los pueblos de los países interesados, se llevará a cabo efectivamente y será duradero. Solo cuando las partes involucradas lleguen a un acuerdo mediante negociaciones en pie de igualdad, se resolverá una disputa de una vez por todas, y se garantizará la plena y efectiva aplicación del acuerdo.
iv. Acerca de la gestión y control de las diferencias y la participación en la cooperación marítima en el Mar Meridional de China
132. Según el derecho y la práctica internacionales, antes de resolver finalmente las disputas marítimas, los Estados implicados deben mantener la moderación y hacer todos los esfuerzos por concertar arreglos provisionales de carácter práctico, incluidos el establecimiento y la mejora de las reglas y mecanismos de gestión y control de disputas y la participación en la cooperación en múltiples dominios, y la promoción del desarrollo conjunto mientras dejan de lado las diferencias, con el fin de mantener la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China y crear condiciones para la solución definitiva de las disputas. La cooperación relevante y el desarrollo conjunto no perjudicarán la delimitación final.
133. China trabaja activamente para fomentar el establecimiento de mecanismos de consulta bilaterales sobre el mar con Estados pertinentes, explora el desarrollo mancomunado en áreas como la pesca, el petróleo y gas, y propone explorar en forma activa el establecimiento por países correspondientes de un mecanismo de cooperación entre los Estados costeros del Mar Meridional de China de acuerdo con las disposiciones pertinentes de la CONVEMAR.
134. China se caracteriza por trabajar siempre con los Estados miembros de la ANSEA para implementar cabal y efectivamente la DOC en su totalidad y promover con entusiasmo la cooperación marítima pragmática. Las partes ya han alcanzado juntas “Medidas de Cosecha Temprana”, entre las que figuran la “Plataforma de la Línea Ardiente de Búsqueda y Salvamento Marítimo entre China y los Estados Miembros de la ANSEA”, la “Plataforma de la Línea Ardiente de Altos Funcionarios en Respuesta a las Emergencias Marítimas entre los Ministerios de Relaciones Exteriores de China y los Estados Miembros de la ANSEA”, así como los “Simulacros Marítimos de Búsqueda y Rescate entre China y los Estados Miembros de la ANSEA”.
135. China siempre persiste en proponer que las partes impulsen activamente las consultas sobre el “Código de Conducta en el Mar Meridional de China” (COC, por sus siglas en inglés) en el marco de implementación cabal y efectiva de la DOC en su totalidad, con miras a llegar cuanto antes a una conclusión sobre la base de los consensos. En aras de gestionar y controlar adecuadamente riesgos en el mar, antes de la conclusión final del COC, China propuso formular las “Medidas Preventivas sobre la Gestión y Control de Riesgos en el Mar”. Esta propuesta ha sido aceptada unánimemente por todos los países miembros de la ANSEA.
v. Acerca de la libertad y seguridad de navegación en el Mar Meridional de China
136. China se dedica siempre a defender la libertad de navegación y sobrevuelo de la que disfrutan todos los países según el derecho internacional, y a mantener la seguridad de las vías marítimas.
137. El Mar Meridional de China es hogar de numerosas vías de navegación marítima importantes que se encuentran entre las principales rutas de navegación para el comercio exterior y la importación de energías del país. Garantizar la libertad de navegación y sobrevuelo y la seguridad de las vías marítimas en el Mar Meridional de China es crucial para nuestro país. Durante largo tiempo, China ha trabajado con los países miembros de la ANSEA para garantizar el acceso libre de obstáculos y la seguridad de las rutas marítimas en el Mar Meridional de China y ha hecho grandes contribuciones a este esfuerzo colectivo. La libertad de navegación y sobrevuelo de la cual gozan todos los Estados en el Mar Meridional de China conforme al derecho internacional nunca ha experimentado ningún problema.
138. China ha ofrecido activamente productos públicos internacionales y se ha esforzado por brindar servicios a la comunidad internacional, tales como la navegación y ayudas a la navegación, la búsqueda y rescate, así como la información sobre las condiciones del mar y los pronósticos meteorológicos, a través del fomento de capacidades en varias áreas, a fin de garantizar y promover la seguridad de las vías marítimas en el Mar Meridional de China.
139. China se pronuncia por que en el ejercicio de la libertad de navegación y sobrevuelo en el Mar Meridional de China, las partes relevantes respeten plenamente la soberanía y los intereses de seguridad de los países costeros y se atengan a las leyes y los reglamentos promulgados por estos países en concordancia con la CONVEMAR y otras reglas del derecho internacional.
vi. Acerca del mantenimiento de la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China
140. China aboga por que la paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China sean mantenidas en conjunto por China y los países miembros de la ANSEA.
141. China persevera en seguir el camino de desarrollo pacífico y adherirse a una política de defensa nacional de carácter defensivo. Persiste en una nueva concepción de la seguridad caracterizada por confianza mutua, beneficio recíproco, igualdad y coordinación, y se adhiere a una política exterior que considera a los vecinos como amigos y compañeros y contribuye a construir un vecindario amigable, tranquilo y próspero, que se basa en el principio de amistad, sinceridad, beneficio mutuo e inclusividad. China es una fuerza firme para mantener la paz y la estabilidad e impulsar la cooperación y el desarrollo en el Mar Meridional de China. Dedica energías a profundizar la buena vecindad y amistad y promover activamente la cooperación pragmática con sus vecinos y las organizaciones regionales, incluida la ANSEA, para materializar el beneficio mutuo y ganancia compartida.
142. El Mar Meridional de China sirve como puente de comunicación y, también, enlace de paz, amistad, cooperación y desarrollo entre China y sus vecinos. La paz y la estabilidad en el Mar Meridional de China son vitales para la seguridad, el desarrollo y la prosperidad de los países y el bienestar de los pueblos de la región. Materializar la paz, la estabilidad, la prosperidad y el desarrollo en la región del Mar Meridional de China es la aspiración y la responsabilidad comunes de China y los Estados miembros de la ANSEA, y coincide con los intereses conjuntos de todos los países.
143. China continuará haciendo esfuerzos incansables por alcanzar esta meta.
(Editor:Rosa Liu,Rocío Huang)