El presidente de Argentina, Mauricio Macri, viajó hoy a la provincia de Entre Ríos (noreste) para encabezar una reunión del "comité de crisis" instalado para atender la emergencia por las graves inundaciones, informó la prensa local.
Se contempla que el mandatario argentino arribe a la ciudad de Concordia a unos 430 kilómetros al noreste de Buenos Aires (capital) a las 12:00 tiempo local (15:00 GMT) para coordinar acciones que lleven a superar "las más graves" inundaciones en medio siglo.
En el encuentro del "comité de crisis" participará también el gobernador entrerriano, Gustavo Bordet, así como el intendente de esa localidad, Enrique Cresto.
Por su parte, el ministro de Interior, Rogelio Frigerio, recorrió este domingo las provincias afectadas en compañía del jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, así como de otras autoridades locales.
Frigerio señaló que las inundaciones por las crecidas de los ríos Paraná, Uruguay y Paraguay "apuntan a ser de las más complicadas de la historia".
"Si se logra pasar este fin de semana sin lluvias empezaremos la semana más tranquilos", sostuvo.
El recorrido de los funcionarios incluyó las localidades de Entre Ríos y el Chaco situadas al norte de Buenos Aires (capital) en los límites con Paraguay.
Unás 20.000 personas han sido desalojadas en la zona debido a que sus viviendas resultaron afectadas por la crecida.
El ministro de Interior expusó a la prensa local que las aguas han afectado provincias argentinas como Chaco, Formosa, Misiones y Santa Fe, además de localidades uruguayas como Concordia, Colón, Concepción y Goya.
"Lo más complicado se verifica en Concordia, porque el agua ya está en algunos lugares del casco urbano, por lo que el problema de la evacuación es más severo", dijo Frigerio.
A su vez, el gobernador Bordet comentó que la situación estaba "estabilizada" porque el río Uruguay dejó de crecer "gracias a las buenas condicioones climáticas, por lo que no se están evacuando más viviendas en Concordia".
En esa localidad del país vecino hay más de 10.000 personas desplazadas por las inundaciones, mientras que en Corrientes están en la misma situación otras 8.000.