SEUL, 8 ago (Xinhua) -- La Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa desempeñó un papel importante en la Guerra Global contra el Fascismo, explicó Kim Ji-hwan, profesor de la Universidad Nacional Incheon de Corea del Sur, en una entrevista reciente con Xinhua.
"La resistencia de China contra el Ejército japonés aplastó el plan del militarismo japonés de esclavizar a otros países asiáticos, salvando las vidas de millones de personas y garantizando la paz regional", anotó el historiador surcoreano.
Kim, profesor de la Academia de Estudios de China, estudió la historia de China del periodo de la guerra antijaponesa durante años, principalmente concentrándose en la estrategia económica en el periodo de guerra.
Kim señaló que China tomó parte en el frente unido antifascista internacional con Estados Unidos, la Unión Soviética, Francia y otros países, para conseguir la victoria final durante la Segunda Guerra Mundial. La victoria también restableció el estatus de China como potencia principal en el mundo, agregó.
No podríamos haber logrado "la victoria en la Guerra Global contra el Fascismo sin los sacrificios del pueblo chino y de otros países. El pueblo chino ha mostrado su fuerte deseo por la paz y se ganó su plena libertad e integridad soberana a través de la victoria de la guerra", dijo Kim.
El profesor subrayó que como columna vertebral de la fuerza de resistencia, el Partido Comunista de China (PCCh) desempeñó un papel importante para garantizar la victoria en la guerra.
"El PCCh desempeñó un papel más activo en la lucha contra los fascistas japoneses. Comparado con la primera línea de batalla, la lucha tras las líneas enemigas encabezadas por el PCCh fueron igual de importantes", indicó Kim.
Kim añadió que el pueblo coreano también cooperó con los chinos en frustrar la invasión de Japón. Desde que el Gobierno Provisional de la República de Corea fuera establecido en Shanghai en 1919, recibió el apoyo del pueblo y del gobierno chinos. La Academia Militar de Huangpu ayudó a entrenar a los activistas coreanos independientes, quienes también participaron en los movimientos antijaponeses.
El historiador surcoreano también exhortó a su país y a China a que refuercen el estudio conjunto sobre la guerra antijaponesa, ya que comparten el sufrimiento común causado por la invasión de Japón, y lucharon conjuntamente contra la agresión japonesa.
"Con este año marcando el 70º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, deseo que China y Corea del Sur formen una nueva alianza antifascista en el terreno del estudio histórico, igual que lo hicieron durante la guerra antijaponesa", dijo Kim.
Aunque el pueblo asiático salió victorioso de la guerra antijaponesa, señaló Kim, las llamas del militarismo en Japón todavía se ciernen sobre la paz y la seguridad regionales.
"Las fuerzas derechistas siguen encubriendo la historia de agresión de Japón. Los libros de texto que minimizan los crímenes de Japón en el periodo de guerra no pueden ayudar a los jóvenes japoneses a entender la verdad de la historia", dijo Kim.
Kim indicó que no son suficientes los actuales estudios conjuntos de China y Corea del Sur sobre temas como las mujeres de solaz, la masacre de Nanjing, los horribles experimentos de la Unidad 731 contra seres humanos, y otros crímenes perpetrados por Japón en tiempos de guerra.
Aconsejó que las instituciones históricas de China abran más archivos y documentos históricos a los investigadores surcoreanos, y que ambas partes impulsen intercambios culturales más estrechos.
"Un estudio conjunto más sistemático y detallado entre los dos países ayudará definitivamente a impedir que las fuerzas de derecha japonesas distorsionen la historia", manifestó Kim.