El ex secretario de Comercio de Estados Unidos, Carlos Gutiérrez, pidió incrementar la confianza estratégica y profundizar la cooperación económica entre China y Estados Unidos y dijo que China es más un colaborador que un competidor de Estados Unidos.
En una entrevista con Xinhua tras la reunión celebrada el miércoles entre líderes empresariales y ex funcionarios chinos y estadounidenses, Gutiérrez dijo que la falta de confianza estratégica es el principal desafío de las relaciones bilaterales.
"A menudo no entendemos muy bien a China y tampoco las compañías y funcionarios gubernamentales chinos entienden muy bien el sistema de Estados Unidos. Creo que eso conduce a malentendidos y estos malentendidos pueden conducir a la falta de confianza", dijo Gutiérrez.
El ex secretario dijo que la próxima reunión entre el presidente de China, Xi Jinping, y el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, será una oportunidad para que los dos líderes construyan una relación personal, la cual, dijo, desempeñará un papel importante en los lazos bilaterales.
"Lo que hace tan especial esta reunión es que se realizará en un marco informal. Los dos líderes tendrán la oportunidad de pasar tiempo juntos a solas", dijo Gutiérrez.
Gutiérrez enfatizó la tolerancia en la construcción de la confianza entre los dos países y dijo que China y Estados Unidos deben ser tolerantes con sus diferencias y concentrarse en el hecho de que tienen muchas similitudes.
El ex secretario también pidió realizar más esfuerzos para ayudar a los naciones a entenderse mejor, incluyendo el fomento al turismo y los intercambios educativos.
Existen grandes oportunidades para que las dos principales economías mundiales aumenten la cooperación en áreas como las de energía y servicios financieros.
"En ocasiones, nuestras compañías competirán, pero eso es normal, es parte del mercado. Lo importante es que seamos amigos, aliados y colaboradores", dijo Gutiérrez.
Estados Unidos y China, las dos mayores economías del mundo, también son los respectivos segundos socios comerciales más grandes. El comercio entre los dos países ha aumentado en las últimas tres décadas hasta alcanzar los 500.000 millones de dólares en 2012.
Gutiérrez dijo que Estados Unidos debe "tener cuidado con ser muy preceptivo" en términos de lo que quiere que China haga en relación con su política de tipo de cambio.
El ex secretario dijo que cree que China tiene un plan para reformar el mecanismo del tipo de cambio y que ejecutará el plan cuando sea el momento adecuado y agregó que Estados Unidos debe confiar en China.
"Si Estados Unidos hace de esto un tema central, creo que podría tener consecuencias no deseadas", dijo Gutiérrez. "Queremos ver que la divisa china sea plenamente convertible y que su valor esté basado y determinado por el mercado, pero lo será en el momento adecuado".
Gutiérrez también rechazó las preocupaciones en el sentido de que los esfuerzos de Estados Unidos para revitalizar su industria manufacturera causarán un retroceso en las inversiones y los empleos chinos de vuelta a Estados Unidos y dijo que los esfuerzos no crearán demasiada competencia entre los dos países.
La revitalización de la industria manufacturera de Estados Unidos será reflejada principalmente en los productos, las innovaciones y las tecnologías nuevos y no cambiará drásticamente la estructura de la economía estadounidense dominada por el sector servicios, explicó Gutiérrez.
El ex secretario expresó su optimismo sobre las perspectivas de mediano plazo de un acuerdo bilateral de libre comercio (TLC) entre China y Estados Unidos.
"Creo que lo importante es que hace dos años nadie hablaba de un TLC, pero ahora hay mucha discusión acerca del momento en que China y Estados Unidos puedan lograr un TLC", dijo Gutiérrez.
Gutiérrez dijo que un tratado bilateral de inversiones está siendo negociado en estos momentos por los dos países, como una base para alcanzar un TLC.
Se espera que el tema sea discutido, aunque quizás no a fondo, durante el próximo encuentro entre Xi y Obama, dijo Gutiérrez.
La reunión está programada para realizarse el 7 y 8 de junio en Rancho Mirage, en California.
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