CONAKRY, 18 jul (Xinhua) -- La cifra de muertos resultado de la lucha que estalló la noche del domingo en la región administrativa de N'Zerekore en el sureste de Guinea aumentó a 54 y la de heridos ha superado los 100.
Ahora reina una tensa calma en N'Zerekore, dijo el miércoles un periodista que sólo se identificó como Diallo y quien proporcionó la cifra actualizada de víctimas. También dijo a Xinhua que se escuchaban tiroteos esporádicos en distintas partes del poblado.
A pesar del toque de queda impuesto en el área y del despliegue de oficiales de seguridad en los sitios estratégicos en el poblado, la tensión sigue prevaleciendo en los centros urbanos y las aldeas vecinas, en especial en Koule, una comunidad rural a 17 kilómetros de las áreas centrales, punto clave del conflicto.
La situación ha causado pánico entre los residentes, quienes se vieron forzados a permanecer en sus casas por temor a una escalada de la lucha.
El miércoles, durante las operaciones para restablecer la calma, las fuerzas de seguridad arrestaron a ocho personas sospechosas de ser instigar y perpetrar los ataques. Los arrestados portaban armas de fuego y objetos contundentes.
Antes de partir el miércoles para asistir a la 43 cumbre del bloque Africa Occidental, Ecowas, en Nigeria, el presidente de Guinea, Alpha Conde, emitió un mensaje a la nación para pedir a los protagonistas del conflicto que mantengan la calma y ejerzan la moderación.
Conde condenó los ataques y prometió que todos los involucrados serán identificados y perseguidos.
Como la señal de la televisión y la radio nacionales no llegó al poblado de N'Zerekore, los residentes no escucharon el discurso del presidente.
Una delegación del gobierno dirigida por el ministro a cargo de la coordinación de la seguridad presidencial, Claude Pivi, está realizando esfuerzos de reconciliación junto con la autoridades regionales.
Para garantizar que se restaure la paz duradera en el área, las autoridades han transmitido continuamente mensajes de sensibilización mediante las estaciones de radio privadas y comunitarias en la región de N'Zerekore.
Los cuerpos de las víctimas fueron enterrados el miércoles, de acuerdo con las instrucciones de los líderes regionales.
Los enfrentamientos tuvieron lugar después del intento de un joven koniake de robar combustible de una gasolinera entre la noche del domingo y la mañana del lunes, informó el alcalde de N'Zerekore, Mamady Bamy.
El vigilante de la gasolinera, perteneciente al grupo étnico guerze, disparó contra el presunto ladrón, quien murió en el lugar.
La noticia se propagó en N'Zerekore y el grupo étnico koniake movilizó a sus miembros para vengar el asesinato.
La violencia y el creciente número de víctimas hicieron que las autoridades declararan un toque de queda en el poblado y en las aldeas vecinas para evitar más muertes.