El procurador general de Egipto, Talat Ibrahim Abdullah, decidió establecer una fiscalía especial para investigar los delitos cometidos durante los disturbios políticos de 2011, informó hoy la agencia oficial de noticias MENA.
El objetivo de la fiscalía recién formada es evaluar el informe del comité de investigación formado por el presidente Mohamed Morsi respecto al asesinato y ataque contra manifestantes pacíficos durante las manifestaciones que provocaron la caída del presidente Hosni Mubarak.
La fiscalía especial de 20 miembros, presidida por el consejero Amr Fawzi, también se encargará de los delitos de ocultamiento de evidencia y de engaño a la justicia para encubrir la corrupción política de figuras del régimen anterior.
Mubarak y la mayoría de sus ministros están en prisión acusados de ordenar la matanza de manifestantes, corrupción política o especulación.
Aunque Mubarak y el exministro del Interior Habib al-Adly cumplen cadena perpetua, muchos ex funcionarios, policías y ministros han sido absueltos de esos cargos, lo que ha causado la molestia de los egipcios. Esto provocó que Morsi creara el comité investigador.
El Tribunal de Apelaciones tiene programado decidir el domingo la apelación presentada por Mubarak y Al-Adly respecto a su condena por ordenar la matanza de los manifestantes.