El Consejo de Seguridad de la ONU condenó enérgicamente este martes los ataques perpetrados por rebeldes del Movimiento 23 de marzo (M23)en la República Democrática del Congo (RDC) y exigió su inmediata retirada de Goma, capital de la provincia de Kivu del Norte.
En una resolución adoptada unánimente por las 15 naciones que integran el consejo, todos sus miembros "condenan enérgicamente" la reanudación de los ataques por parte de los rebeldes del M23 en Kivu del Norte, en el oriente de la RDC, y la toma de Goma.
El consejo "exige la inmediata retirada del M23 de Goma, el cese de cualquier avance del grupo rebelde y que sus miembros se disuelvan y depongan las armas inmediata y permanentemente, así como la restauración de la autoridad estatal del gobierno de la RDC en Goma y Kivu del Norte", expresó el texto.
Los nuevos rebeldes del M23 protagonizaron la madrugada del sábado un ataque contra el poblado Kibumba en Kivo del Norte, forzando a la ONU a desplegar helicópteros de ataque para la defensa y la convocatoria de una reunión de emergencia para discutir el resurgimiento de la violencia.
Pese a la presencia de 1.500 solados de la Misión de Estabilización de la ONU en la RDC (MONUSCO), los rebeldes del M23 reivindicaron el martes haber tomado el control de Goma.
Además, la resolución del consejo condenó enérgicamente al M23 y sus ataques contra civiles, miembros del contingente para el mantenimiento de la paz de MONUSCO y trabajadores humanitarios, así como la violación de los derechos humanos.
El grupo rebelde M23, integrado por soldados desertores del ejército nacional del país africano, recientemente tomó el control de siete poblados en la provincia de Kivu del Norte y atacó escuelas, hospitales, viviendas y objetivos civiles.