SANTIAGO, 13 ene (Xinhua) -- El canciller de Chile, Alfredo Moreno, pidió hoy "cuidar y engrandecer" las relaciones entre Chile y Perú, a dos semanas del fallo que la Corte Internacional de Justicia de La Haya dictará el 27 de enero sobre el litigio marítimo.
"Los dos países van a seguir siendo vecinos al día siguiente de este fallo, vamos a seguir teniendo las relaciones que hoy tenemos, vamos a seguir teniendo los migrantes que hoy hay, y tienen un futuro común estos dos países, todo lo que tenemos que cuidar y engrandecer", expuso el canciller chileno.
En cuanto al ambiente triunfalista que existe en Perú sobre el futuro fallo, Moreno indicó que "lo que a mí me toca es el ambiente que hay en Chile; veo tranquilidad, veo que hay mesura, sentido común, y me parece que eso es lo que debe prevalecer".
Rechazó las posturas que han surgido en Santiago sobre la posibilidad de desconocer el fallo si es adverso a Chile.
"Chile es firmante del pacto de Bogotá desde 1948, pacto que obliga a nuestro país y a quienes son firmantes a acudir a la Corte (CIJ) y cuando uno hace eso, naturalmente le da la autoridad a la Corte para poder decidir", expuso Moreno.
"Una vez que la Corte decide, no se puede utilizar, de acuerdo con lo que establece la propia Carta de las Naciones Unidas, el derecho interno para modificar una sentencia que proviene del derecho internacional", argumentó el canciller.
"Los países ya han hecho todo lo que tenían que hacer, han presentado sus mejores argumentos con su mejor gente, y ahora la Corte va a señalar el resultado", agregó.
Mientras, el presidente Sebastián Piñera recibió este lunes a todos los líderes de los partidos políticos chilenos y a los presidentes de las Comisiones de Relaciones Exteriores del Congreso, a quienes les explicó la posición chilena en este conflicto, para recibir después total apoyo de oficialistas como de opositores.
Luego de asistir a esa reunión, el diputado opositor Jorge Tarud dijo que el fallo de la CIJ se podría haber filtrado y que sería desfavorable para Chile, por lo que había provocado triunfalismo en Perú, lo cual fue descartado por el gobierno.
Al respecto, la ministra y vocera, Cecilia Pérez dijo que "nadie ha conocido el fallo. Hemos llamado a la responsabilidad, a la tranquilidad. Como gobierno, agradecemos que se respete este ambiente, pero no podemos hacernos cargo de las declaraciones de cada una de las personas que quieran opinar".
Sobre al propuesta del ex presidente peruano Alan García de llenar las plazas de su país con banderas un día antes del fallo, comentó que "no nos hacemos cargo de lo que quiera hacer nuestro país hermano".
Hoy, la televisión chilena transmitió una entrevista con el coagente peruano ante la CIJ en La Haya, José Antonio García Belaunde, quien afirmó estar convencido de que Perú y Chile acatarán el fallo que emitirá el tribunal de las Naciones Unidas el 27 de enero sobre el diferendo marítimo entre ambos países.
"Yo no tengo dudas de que se va acatar el fallo. No hay país que haya desacatado (a la CIJ) porque el costo de hacerlo es muy grande", dijo García Belaunde.
"Hay que esperar el fallo tranquilamente, serenamente y convencidos que lo único que queda hacer es acatarlo", expresó el funcionario peruano.
Perú y Chile están a la espera de la lectura de la sentencia del tribunal internacional, tras seis años de proceso, fallo que es inapelable y de cumplimiento obligatorio para las partes, y ambos gobiernos han anunciado que respetarán y aplicarán el fallo.
Lima ha declarado que no se sabe cuánto tiempo se tardará en ejecutar el fallo, aunque el presidente peruano Ollanta Humala dijo que será de forma "inmediata".
Perú demandó a Chile en enero de 2008 ante el tribunal de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) con sede en La Haya, Holanda, para exigir una delimitación marítima, con el argumento de que entre ambos Estados sólo existe un convenio pesquero.
Por el contrario Chile sostiene que ambas naciones firmaron en 1952 un tratado de límites marítimos.
El litigio es una de las consecuencias tardías de la Guerra del Salitre o del Pacífico, que enfrentó a Chile con Perú y Bolivia de 1879 a 1883.
La demanda en un comienzo generó tensión en las relaciones bilaterales, no obstante, Lima y Santiago han asegurado que respetarán el fallo de la CIJ.
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