Entre 10 y 12 mandatarios han confirmado que asistirán a la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno prevista para los próximos 18 y 19 de octubre en Panamá, informó hoy en la capital panameña el secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias.
El funcionario, quien no especificó los nombres de los gobernantes que han confirmado su intención de estar en la Cumbre, explicó que se están esperando confirmaciones, en momentos en que se vive en un ambiente político complicado en el mundo y en la región, y que podría ocasionar que algún mandatario no concurriera.
Iglesias, quien habló del tema luego de una reunión que sostuvo con el ministro de Relaciones Exteriores de Panamá, Fernando Núñez Fábrega, en la sede de la Cancillería -en el Casco Antiguo de la capital panameña-, recordó que para esta Cumbre se lleva un año de preparación, con la participación de decenas de ministros.
Señaló que todos los países estarán representados en la Cumbre, y que si algún presidente no puede venir, vendrá algún vicepresidente u otra figura.
El secretario general iberoamericano destacó que estas cumbres dan la posibilidad a los presidentes de encontrarse, conversar y mirarse a los ojos como expresión de la diplomacia, por lo que no descartó que los jefes de Estado puedan abordar diferentes temas, teniendo en cuenta que el encuentro tendrá agenda abierta.
Mencionó como novedades que se espera para esta Cumbre una vigorización con una simplificación.
Recordó que el propósito es que las cumbres iberoamericanas tengan cada dos años una reunión de jefes de Estado y de Gobierno, y en medio un encuentro de cancilleres, precedida por una reunión sobre toda la cooperación iberoamericana.
"Se está reafirmando el objetivo para que las cumbres sean más ágiles", remarcó.
Dijo, ante una consulta de Xinhua, que en ocasión de la Cumbre los jefes de Estado tendrán un almuerzo de alrededor de tres horas, durante el cual se plantearán los temas que se quieran traer a discusión, de una manera libre y privada.
Iglesias reconoció que se espera para la Cumbre la aparición de temas contingentes, como las grandes prioridades que tiene que abordar Iberoamérica en los años que vendrán, actualizando un poco la cooperación de este mecanismo, para que esté acorde con los grandes cambios que se están dando en el mundo.
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