Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) negaron hoy en La Habana cualquier "reporte oficial" de sus fuerzas sobre el caso de dos policías cuyo secuestro el gobierno del presidente, Juan Manuel Santos, atribuyó a la guerrilla.
"Habrá que esperar cuál es el planteamiento de la fuerza o el bloque guerrillero que ejecutó tal acción. Nosotros no tenemos hasta ahora ningún reporte oficial en torno al hecho, si son o no son las FARC", dijo Luciano Marín Arango, alias "Iván Márquez", el número dos de la guerrilla.
Márquez hizo la declaración minutos antes de reanudarse las conversaciones de paz con una delegación de las autoridades colombianas en el habanero Palacio de Convenciones, sede permanente del diálogo iniciado el 19 de noviembre último.
Los dos policías fueron capturados el viernes pasado en el departamento del Valle del Cauca, en una acción atribuida por las fuerzas del orden a una columna móvil de las FARC.
Las FARC-EP consideran a los capturados en combate como "prisioneros de guerra", mientras el gobierno se refiere a ellos como "secuestrados".
El líder rebelde señaló que resulta insensato que el gobierno eleve quejas por las consecuencias de la guerra mientras persiste en perseguir a la guerrilla por todo el territorio colombiano.
"Cada día se ve más necesario buscar un cese bilateral del fuego y de las hostilidades, o en su defecto convenir un tratado de regulación de la guerra", señaló el representante de la guerrilla.
La reunión de este jueves corresponde a la primera jornada del cuarto ciclo del diálogo, con Cuba y Noruega como garantes.
Ambas partes cerraron la tercera ronda con "aproximaciones" en el problema de la tierra, aunque aún mantienen diferencias "notables" y "de fondo" sobre ese primer punto de la agenda.
El resto de los asuntos se refieren a la participación política, el fin del conflicto armado, la solución al problema de las drogas ilícitas, los derechos de las víctimas y los mecanismos de verificación y refrendación de lo pactado en la mesa.