Las elecciones regionales directas fueron canceladas en 2004 por el entonces presidente Vladimir Putin, debido a que las consideraba una manera de promover el sentimiento separatista,
Después de las elecciones parlamentarias de 2011, manifestaciones masivas surgieron por toda Rusia quejándose del supuesto fraude en las elecciones y exigiendo que se volviera a las elecciones regionales directas.