El Corinthians brasileño se clasificó hoy a la final del Mundial de Clubes tras derrotar por la mínima diferencia al egipcio Al Ahly en un partido en el que pese a ingresar a la cancha como favorito, sufrió mucho para alzarse con la victoria.
El delantero peruano Paolo Guerrero, quien por poco queda fuera del equipo que vino a Japón debido a una lesión en la rodilla, anotó el único gol del partido a los 29 minutos al completar de cabezazo un cruce de Douglas.
El "Timao" aguarda ahora el resultado de la otra semifinal, entre el Chelsea inglés y el Monterrey, de México para conocer a su rival el domingo en la disputa por su segundo título en este torneo que venció en la primera edición disputada en 2000 en Brasil.
El duelo de este miércoles, jugado en el Yokohama Stadium bajo una temperatura gélida de cuatro grados, contó con la presencia de unos 31.000 personas, la gran mayoría miembros de hinchas del Corinthians, que viven en Japón.
Además, miles de fanáticos viajaron para seguir a su "Timao", con banderas, pancartas y cánticos incesantes.
Pese al nerviosismo inicial , el Corithians se lanzó al ataque desde los primeros minutos y tuvo su primer intento de gol a los 9 minutos con un disparo de Douglas que pasó cerca del palo derecho del portero Ekramy. Pero la muralla de la defensa egipcia recién logro ser superada en el minuto 29, cuando Guerrero, que pasó la mayor parte del juego bajo fuerte marcaje, aprovechó un centro de Douglas para anotar el único tanto del partido.
Tras el gol, el ritmo del Corinthians se redujo aunque los pupilos del técnico Tite siguieron con el control del balón mientras el Al- Ahly no logró protagonizar los anunciados contragolpes con los cuales anunció que llegaría a la meta del "Timao".
Los africanos volvieron para la etapa final más decididos a atacar mientras que los brasileños parecían satisfechos con el 1-0 y más dispuestos a defender el modesto marcador que en intentar ampliarlo.
Tite sustituyó al veterano atacante Emerson, quien estuvo bastante deslucido en el campo por el joven delantero Romarinho y puso a Jorge Henrique en lugar de Douglas, pero no fue suficiente para aumentar el rendimiento del equipo.
Los egipcios fueron dominando el partido y aumentando sus oportunidades de gol que sólo no se concretaron a raíz de la falta de puntería,para desesperó de los jugadores del Corinthians y de su hinchada que aguardaban con ansiedad el pitido final del árbitro mexicano Marco Rodríguez que dio varios minutos de descuento.
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