Palacios y construcciones budistas tibetanos ubicados en el extremo noroeste de la Ciudad Prohibida, actualmente el Museo del Palacio en Beijing, fueron reconstruidos después de un desastroso incendio que los dañó hace cerca de 90 años.
La reconstrucción siguió estrictamente la tradición de materiales, procedimientos y técnicas para restaurar la apariencia eel Período Qianlong (1736-1795), señaló un comunicado del Museo del Palacio.
Los palacios y construcciones fueron el área central de las actividades budistas tibetanas al interior de la Ciudad Prohibida durante la Dinastía Qing (1644-1911). Sin embargo, fueron consumidos por un incendio en el verano de 1923, el cual también destruyó el Jardín del Palacio Jianfu en el norte.
La restauración de los edificios budistas tibetanos comenzó después de que el museo y el Fondo del Patrimonio de China en Hong Kong completaran la reconstrucción del Jardín en 2005.
Parte del área será asignada al centro de investigación del museo sobre budismo tibetano, y el resto serán salas de exhibición para reliquias culturales relacionadas, añade el comunicado.
Un total de 24 emperadores vivieron en la Ciudad Prohibida desde 1420, y el lugar fue incluido en la Lista de Patrimonio de la Humanidad de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en 1987.